Page 4 - RevAsimetN138

E D I T O R
Estimados socios:
Me es muy grato dirigirme a ustedes para
presentarles la última edición de la revista
Metal & Industria de este año 2024. Mantenerlos
informados de nuestro quehacer gremial
y contribuir a una comunicación fluida y
permanente con los asociados es un objetivo
primordial de ASIMET, y este medio de
comunicación sin duda que es el eje central de
este propósito.
En un abrir y cerrar de ojos ya nos encontramos
finalizando un año que no ha sido fácil, pero que,
por lo mismo, nos motiva a seguir trabajando
tras nuestro desafío natural y permanente, y que
nos alienta como empresarios manufactureros:
hacer de Chile un país industrial.
En efecto, el anuncio de cierre de una de
nuestras empresas socias más emblemáticas,
y que durante 70 años aportó al desarrollo
industrial de Chile, fue un duro golpe para
nuestra asociación, y, sin duda, para todo el
país, y en especial para la Región del Biobío.
El apagado del alto horno y la detención de
la acerería y colada continua de Huachipato
marca el cierre de una etapa trascendental de
la industria siderúrgica chilena, pero debe ser
una oportunidad para avanzar en otras miradas
y desafíos que nos imponen los actuales
mercados.
En lo que respecta al desempeño de nuestro
sector metalúrgico metalmecánico, en
septiembre se alcanzó un crecimiento de 8,6%,
acumulando en los primeros nueve meses del
año un nivel de producción que llegó a un -1,9%,
4
I A L
una mejora significativa respecto de la caída
de 3% que registraba la industria a agosto
de 2024. Este desempeño, sin embargo,
se debe a una base de comparación poco
exigente, y alertan respecto de los efectos
del cierre de Huachipato, que ya se están
haciendo sentir en el rubro de Industrias
básicas de hierro, que el noveno mes del
año marcó una caída de 23,1%.
Hoy, los retos son muchos, y como lo señalé
en mi discurso de la Cena Aniversario,
el acento debe estar puesto en retomar
las confianzas para que Chile reanude la
senda del crecimiento, para que así las
futuras generaciones tengan las mejores
oportunidades de desarrollo en Chile y no
emprendan un camino fuera de nuestras
fronteras.
El escenario está complicado: Un
crecimiento de 1,8% durante el decenio
que se avecina, como lo pronosticó el
Banco Central, implicará seguir en la
misma mediocridad en la que hemos
estado en los últimos 10 años, en otras
palabras, una segunda década perdida.
Una década que estrechó las posibilidades
laborales, estancó los salarios reales,
y crispó la situación política, sin poder
destrabar graves problemas que se siguen
arrastrando. Siempre es positivo alentar en
los ciudadanos un sentido de compromiso
con la Patria, entendiendo a éste como
un proyecto común al que tienen la