En reunión con el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, el gremio le señaló que las iniciativas de Desarrollo País (ex Fondo de Infraestructura) y del sistema de concesiones de esa cartera son clave para fortalecer el tejido productivo y generar más y mejores empleos.
Generar más y mejores empleos, e impulsar nuevas y diversas actividades que vayan fortaleciendo el tejido productivo, las capacidades de desarrollo y la identidad de cada territorio son algunos de los objetivos de la Estrategia Industrial que elaboró ASIMET para dinamizar la economía a través del sector manufacturero, y que hoy presentó a la máxima autoridad del Ministerio de Obras Públicas.
Durante la reunión sostenida con el titular de la cartera, Juan Carlos García, el gremio le planteó acelerar los proyectos de Desarrollo País (ex Fondo de Infraestructura) y del sistema de concesiones del MOP, de modo de impactar la tasa de crecimiento de la economía nacional. “En su Plan de Negocios Quinquenal, en junio de 2020, el Fondo de Infraestructura definió que sus planes de desarrollo alcanzarían los US$ 1.375 millones, y que se centrarían en proyectos de vivienda, barrios cívicos, fibra óptica, desalación y transporte público. Creemos de la mayor importancia que en las actuales circunstancias se dé prioridad a los proyectos de cable de Fibra Óptica Antártica y Sudamérica – Asía-Oceanía; desalación de aguas, y terminales para los Buses RED”, señaló el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni.
El dirigente gremial agregó que también le hicieron ver al ministro García la necesidad de acelerar y optimizar el pipeline de proyectos de concesiones del Gobierno, priorizando aquellos que reduzcan cuellos de botella logísticos.
“Todas las propuestas que planteamos en nuestra Estrategia Industrial que estamos presentando a las distintas autoridades están enfocadas y conversan con el objetivo que se planteó este Gobierno de poner en marcha una nueva política industrial para Chile, y con el desafío que asumió recientemente el Presidente de la República de que el país vuelva a tener una productividad anual de 1,5%. Como gremio queremos aportar en este proceso y, en ese contexto, solicitamos al Gobierno acelerar la marcha para poder avanzar de manera concreta hacia ese objetivo”, concluyó Arrigoni.
El gremio de los industriales metalúrgicos metalmecánicos acusó que rebajar la jornada de 45 a 41 horas semanales aumentará el costo de las empresas, por lo que enviar la iniciativa sin una medida que compense el impacto negativo en productividad es “sorprendente”.
Decepcionado y sorprendido se mostró el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni frente al envío que el Gobierno hará del proyecto de ley que baja la jornada laboral de 45 a 41 horas semanales, “sin que, al mismo tiempo, piense en la Industria y el crecimiento de Chile, con medidas que compensen la pérdida de productividad y el mayor costo que ello significará para las empresas”.
El dirigente gremial enfatizó que en enero de 2018 la OCDE publicó un “peer review” sobre transformación productiva en Chile llamando la atención que las políticas públicas no tengan planes estratégicos, e hicieron un llamado a un “pacto renovado entre el Gobierno, las empresas, la academia y la sociedad. Esto, que es habitual en las economías desarrolladas, no se hace en Chile, por el contrario, hoy en Chile se improvisa, y este proyecto es un claro ejemplo de ello”.
No generará un mayor empleo productivo
En relación a los anuncios de la autoridad del Trabajo que esta iniciativa creará 350 mil nuevos empleos, Arrigoni dijo que no resulta convincente pues “el proyecto no aclara que será un costo adicional para las empresas, que bajará la productividad por trabajador y en consecuencia perjudicará el crecimiento”.
El dirigente empresarial reiteró la necesidad de que el país conjuntamente con el sector público y privado impulse la modernización del modelo económico, que debería significar la reindustrialización del país. “Chile vivió por 35 años un ciclo virtuoso de crecimiento que está llegando a su fin desde hace algunos años; se trata de un fenómeno común en la historia de muchas economías, pero sólo las que mutaron su estrategia de crecimiento dieron el salto al desarrollo, las que no lo hicieron cayeron en la “trampa del ingreso medio”, afirmó.
Acto seguido precisó que “si queremos estar a la misma altura de los países desarrollados, con jornadas laborales reducidas, tenemos que ser capaces de igualarnos en los índices de productividad que exhiben esas naciones, con medidas que generen un aumento de la competitividad, con estrategias que apunten a poner en marcha el tránsito de nuestra economía hacia un modelo de desarrollo basado en la reindustrialización 4.0, con políticas públicas que apoyen a nuestras empresas para su necesaria y urgente reconversión”.
Concluyó señalando que la experiencia internacional indica que “el desarrollo se alcanza aumentando la competitividad internacional, que tiene como insumo principal incrementar la productividad, y esta iniciativa aislada del Gobierno va en el sentido contrario”.
Para el presidente del gremio, Dante Arrigoni, el Gobierno se tiene que convencer que la receta para que el país retome la senda del crecimiento ya la están aplicando los países de la OCDE, y que no es más que invertir en la modernización de la industria.
Su preocupación por el estancamiento que exhibe la economía chilena, que se vio reflejado en el Imacec de 1,9% en marzo, mostró esta mañana el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, señalando que es un hecho que “la economía no despega”, y que no lo hará mientras el Gobierno no se convenza que para que Chile retome la senda del crecimiento “es imprescindible la modernización de la industria, camino que ya tomaron los países de la OCDE. Ellos ya entendieron que el camino correcto es el desarrollo de políticas públicas para la Industria 4.0”, sostuvo.
Arrigoni agregó que para darle un nuevo impulso a la economía chilena se requiere además de mejores escenarios internos, señalando como urgente la aprobación en el más breve plazo de las reformas tributaria y laboral, “que agregan un factor de incertidumbre que es clave a la hora de tomar decisiones de inversión”, sostuvo.
“Debemos dar las garantías para que nuestras empresas puedan competir en igualdad de condiciones con las que existen en los países con los que tenemos tratados de libre comercio. Para ello debemos avanzar en los proyectos tributario y laboral y acordar un plan de Estado con Políticas Públicas Industria 4.0”, concluyó.
El dirigente gremial mostró su inquietud respecto del informe de la OCDE que reveló que la calidad de vida de este sector de la población en el país va a la baja, y llamó a los legisladores a aprobar una reforma tributaria que tenga impacto en inversiones para la reindustrialización 4.0. “Es el único camino para retomar una senda de crecimiento con sentido”, afirmó.
Su inquietud respecto del reciente informe de la OCDE, que señala que en Chile la clase media solo alcanza al 47%, versus el 61% que es el promedio de los países desarrollados, y que la calidad de vida de ese sector va a la baja, mostró esta mañana el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni. Al respecto, indicó que las estadísticas “no deberían sorprendernos, si recordamos que el año pasado Chile creció un 4% y el empleo solo un 1,6%. En otras palabras, podemos decir que en Chile la riqueza no está llegando a la clase media”, enfatizó. quinquenio 2018 –
El timonel de ASIMET sostuvo que la débil participación que tiene la manufactura nacional en el PIB “repercute directamente en la baja de los trabajos de calidad y, consecuentemente, en el aumento en la desigualdad de ingresos”. Agregó que en los países desarrollados existe consenso que el sector que más aporta a la clase media para avanzar y resolver el problema de la brecha de ingresos es la manufactura: “Los empleos de la industria en los países de la OCDE son más altos, en España, por ejemplo, los salarios de este sector son un 24% mayores que en los Servicios y la Construcción”, indicó.
Al respecto, hizo un urgente llamado a los legisladores para que en el proyecto de reforma tributaria se pongan los incentivos en medidas que tengan impacto en inversiones para la reindustrialización 4.0 del país.
“La Industria 4.0 es un tema que involucra a toda la sociedad, no es solo un asunto que atañe a las empresas, o a una elite académica: impacta de manera transversal a todas las personas y por lo tanto debe ser tratada como un asunto de Estado, pues de no abordarla con la urgencia que merece será toda la sociedad la que se quedará atrás, viviendo en el siglo XX mientras el mundo avanza”, concluyó.
Dante Arrigoni hizo estas declaraciones al presidir esta mañana una conferencia desayuno con socios del gremio, donde expuso el gerente general de la Corporación de Bienes de Capital, Orlando Castillo, quien se refirió a las inversiones y proyectos en el quinquenio 2018 – 2022.
El dirigente gremial señaló que mira con moderado optimismo este año luego del bajo desempeño de solo un 2,6% que exhibió el sector manufacturero durante 2018. Alertó sobre la necesidad de contar con políticas públicas pro Industria 4.0, señalando que las empresas del sector “no vemos por parte del Gobierno el sentido de urgencia que merece la modernización de nuestra industria”.
Preocupado por los bajos resultados que obtuvo la industria manufacturera durante 2018 se mostró el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, señalando que luego de crecer solo un 2,6% en ese periodo ve con moderado optimismo los resultados para este año. “Esta cifra significa un nuevo retroceso en nuestra participación en el PIB y la pérdida de empleos de calidad, como ha venido ocurriendo con el cierre de empresas importantes del sector. Vivimos una situación difícil para la manufactura y nos preocupa la lenta evolución de algunos sectores claves como la industria minera, la construcción e infraestructura, entre otros”, afirmó.
Frente a este escenario, indicó que el gremio no ve por parte del Gobierno el sentido de urgencia que merece la modernización de la industria. “Lo hemos advertido casi hasta el cansancio: Chile necesita de políticas públicas que apoyen a nuestras empresas en la necesaria reconversión que necesitamos para competir con los países desarrollados. Nadie se puede sorprender que este año suframos el cierre de más empresas en Chile”, sostuvo.
Arrigoni, que presidió un desayuno con socios de ASIMET al que asistió como invitado el economista Gonzalo Sanhueza, advirtió durante su intervención que ya se cumplió un año del Gobierno de Sebastián Piñera y aún se encuentran en discusión materias que, según dijo, “deberían haber quedado zanjadas, porque fueron señaladas como sus prioridades: entre ellas, la reforma tributaria y la reforma laboral, dos ejes centrales clave para el desarrollo del país”. Al respecto, enfatizó que la industria manufacturera “merece desenvolverse en el mejor de los escenarios para poder desarrollar todo su potencial, entre otras razones porque somos un motor clave de la economía y uno de los sectores que otorga los puestos de trabajo de mayor calidad en Chile”, afirmó.
Finalmente, el presidente de ASIMET enfatizó que no darle la relevancia que corresponde a la reindustrialización que provoca la cuarta revolución industrial, “significa no entender hacia dónde camina hoy el mundo y los países desarrollados, que cuentan todos con políticas públicas 4.0 destinadas a fomentar la modernización de las empresas y también la reconversión de las personas”.