El ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, confirmó este miércoles que el proyecto que se está evaluando al interior del Gobierno y que busca crear un sistema alternativo a la indemnización por años de servicio «no viene en el proyecto de modernización laboral de ahora de marzo, nunca ha ido (…) si no que vamos a seguir evaluándola con otros actores en forma separada».
«La razón es muy simple: nosotros creemos que la primera prioridad son todos aquellos aspectos de jornada de trabajo, de adaptabilidad entre trabajo y vida personal, aquellos temas de negociaciones colectivas, el tema de capacitación, y eso es lo que incluye básicamente el proyecto (de reforma laboral) y que son la prioridad», señaló el titular de la cartera en entrevista en Radio Duna.
De todas formas, el ministro recalcó que «la propuesta de cambios en el sistema de indemnizaciones la estamos evaluando seriamente, pero queremos ampliar esta evaluación con el mundo laboral y también con el Parlamento ahora en funcionamiento».
Respecto a la importancia de evaluar la iniciativa -la cual propone crear un sistema de indemnización a todo evento que considere el pago de medio sueldo por año trabajado-, el secretario de Estado enfatizó que «es muy importante abordar este tema y no hay que esconder al cabeza como las avestruces».
«Hoy día, menos del 8% recibe indemnización: del universo de trabajadores que tienen contratos indefinidos, menos del 8% la recibe, porque para recibirla tiene que tener ese contrato, durar más de un año y ser despedido», explicó el ministro.
Pero, «lo que es peor», según Monckeberg, es que «muchos trabajadores tienen el incentivo a rechazar un cambio de pega positivo para no perder la antigüedad o muchos empleadores tienen un desincentivo a subirle el sueldo al trabajador porque saben que la indemnización se paga en función de los últimos sueldos».
«Todo eso que el sistema hace que el sistema no tenga mucha lógica y haya que estudiarlo a fondo», aseguró el ministro quien hizo hincapié en que «esto no cambia un sistema por otro, sino que establece la posibilidad de optar por un sistema nuevo e incluso, si me arrepiento de haber optado por el nuevo, volver al antiguo».
Consultado por cuán conveniente es un sistema como el que se está evaluando, Monckeberg comentó que «lo que beneficia un sistema a todo evento, independiente del monto, es que mejora mucho la productividad, porque no hay personas esperando que la despidas y hace que las personas puedan estar buscando mejores opciones para trabajar».
«Esa movilidad laboral le hace bien a la economía y, de repente, este sistema -de indemnización por años de servicio- la tranca un poco, de tal manera que hay que ver varios aspectos más que el monto en sí que se paga», cerró.
Fuente: Economía y Negocios Online, febrero 27 de 2019