En este escenario la reconversión laboral es clave y si el país no acelera el proceso se “expone a una pérdida de competitividad”.
El mundo está dividido entre los que señalan que la Inteligencia Artificial (IA) eliminará empleos y entre los que plantean que, por el contrario, será una fuente de nuevos puestos como lo propone el estudio «Impacto de la IA en el mercado laboral chileno», realizado por la consultora DuckerFrontier, por encargo de la multinacional tecnológica Microsoft, que participa en el negocio de la IA global.
«La IA ya está y va a estar en todas las tareas y actividades. En todos los sectores e industrias genera un impacto positivo en la competitividad y especialización de los trabajos», afirma el gerente general de Microsoft Chile, Sergio Rademacher.
El sondeo –que comparó variables, como número de inversiones y empleos, con Brasil, Costa Rica, Argentina, México, Colombia y Perú y data abierta del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional– plantea que implementar herramientas de IA en los procesos productivos, como machine learning, computer visión y cloud, generaría entre 18% y 42% de nuevos empleos. Además, triplicaría la productividad y podría duplicar el Producto Interno Bruto (PIB), pasando de un PIB de 3,1%, a un PIB de 6,1% en 2030.
Para llegar a estas cifras, el estudio creó una simulación para calcular el impacto potencial de la IA en el mercado laboral, la que consta de dos pasos: índice de adopción de IA y nuevas inversiones, las que sumadas, deberían arrojar el efecto neto de la IA, el que se traduce en número de horas de trabajo ahorradas y creadas, y en la productividad adicional.
Rademacher señala que sectores como la banca y minería ya invierten en IA, por ejemplo, en mantenimiento y equipamiento, pero «con una cantidad pequeña que vaya a IA de cara a ideas, generaría un círculo virtuoso que demostraría que es beneficioso para la empresa y empleados», afirma.
Reconversión laboral
De la mano con el avance de la IA, el reporte señala que invertir en la reconversión de los trabajadores existentes y la capacitación de nuevos empleados, tendría un impacto en los trabajos de alta calificación, los que podrían aumentar de 40% (sin maximización de IA) a un 54%.
«La IA es un habilitador de la reconversión laboral (…), uno de sus beneficios es que libera a las personas de tareas altamente repetitivas, que no le generan mucho valor», afirma Rademacher.
Explica que de no acelerar el proceso de reconversión laboral, Chile se expone a «una pérdida de competitividad» y que se deben impulsar iniciativas conjuntas para promover la recalificación.
Hasta la fecha, existen iniciativas que apuntan a la reconversión laboral, como el programa «Talento Digital», iniciativa liderada por el Ministerio de Hacienda y que busca revertir el déficit anual de 5.000 trabajadores TIC, a través de la capacitación de 16 mil personas a 2023. Al respecto, Rademacher señala que «hay que tener un foco en skills digitales, como programadores, gente con pensamiento computacional, también en educación online, personas con visión de negocio creativa (…) Hay que trabajar en conjunto para lograr una recalificación efectiva», señala el ejecutivo.
Fuente: Diario Financiero, enero 08 de 2020