Frente a la aprobación por parte de la Cámara de Diputados del proyecto de ley de royalty a la minería, la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas declara lo siguiente:
La minería del cobre ha contribuido enormemente al desarrollo de Chile. En la última década entregó cerca de US$100.000 millones al fisco y actualmente aporta alrededor del 10% del PIB nacional. Es también el sector con mayor inversión extranjera, con un 33% del total. Estas cifras van más allá de lo económico, y podemos asegurar que se trata de una actividad con una valoración integral, pues su desarrollo ha generado no solo efectos multiplicadores en otros sectores productivos, sino también en aquellos relacionados con la vida social y cultural de las personas.
En efecto, esta actividad ha sido clave en la generación de empleos directos e indirectos y en el desarrollo de una base industrial, la que si bien como gremio hemos sido partidarios que se materialice con mucho mayor fuerza, sin duda representa una plataforma central desde la cual se puede fomentar mayores y mejores encadenamientos productivos hacia el futuro.
Es por ello que, como gremio, miramos con alerta y preocupación la reciente aprobación por parte de la Cámara de Diputados del actual proyecto de royalty a la minería, iniciativa que, a nuestro juicio, no ha contado con estudios de impactos en la inversión futura, tanto en su formulación como en su discusión y debate en el Congreso.
Nos preocupa además la improvisación y celeridad con que se están tramitando proyectos de ley que tienen una gran incidencia en nuestra economía, sobre todo en el largo plazo, y que en este caso particular podría impactar seriamente no solo el desarrollo futuro de la minería, sino también de muchos otros sectores cuyas actividades dependen de esta última.
El mayor precio que este año se ha proyectado para el cobre es un incentivo para que aumente la inversión minera en Chile, en un contexto donde se requiere con urgencia inversión privada y extranjera para recuperar altos niveles de crecimiento, y reactivar la generación de empleo. No obstante, consideramos que la propuesta de royalty minero no solo tendría efectos negativos en la inversión, la actividad y el empleo en esta industria, sino que provocaría un impacto muy negativo en otros sectores productivos nacionales que se encuentran ligados directamente a la minería, como es el caso de nuestro sector metalúrgico metalmecánico.
El actual contexto económico que vive Chile obliga sin duda a debatir sobre nuevas formas de financiamiento para solventar los aportes fiscales que debe realizar el Estado para ir en ayuda de quienes más lo necesitan, y en ese sentido creemos que el aporte tributario que hace la minería al país es un debate legítimo. Pero la discusión en torno a esta tributación se debe realizar de manera informada, con una mirada de futuro y en un contexto de debate sin presiones ni con objetivos que tiene que ver más con obtener réditos políticos que el bienestar de los chilenos.
Es por ello que, como ASIMET, hacemos un llamado a nuestros senadores y senadoras a que enfrenten esta decisión clave que tienen en sus manos con altura de miras, haciendo lo posible por llegar a consensos basados en la fuerza de la razón y en la certidumbre que otorga una debida información de los alcances del proyecto.
Estamos convencidos que esta instancia de debate tributario debe ser una oportunidad para abrir caminos de acuerdos en torno a la mejor manera de compatibilizar el desarrollo de nuestra nación de largo plazo con la calidad de vida y bienestar de todos los chilenos.
Dante Arrigoni C.
Presidente ASIMET