¿Cómo aprovechar la fortaleza del diálogo en las empresas?
En todo tipo de relaciones humanas, el diálogo juega un papel fundamental. El intercambio de mensajes es la esencia de la comunicación y el diálogo una de las formas más recurrentes de transmitir la información.
Si lo llevamos al ambiente laboral, el diálogo también es una herramienta muy poderosa. Sobre todo si se trata de situaciones de crisis o incluso para evitar una. Por esta razón, es importante considerar este recurso que resulta clave para el ambiente laboral y saber cómo sacarle el mayor provecho.
El diálogo como camino a la satisfacción laboral
En el mundo laboral, conceptos como producción, ventas y márgenes de ganancia son de los más comunes. No cabe duda que son factores importantes para el desarrollo, crecimiento y sostenibilidad de cualquier empresa, sin embargo, hay algo más.
Para que estos factores tengan un resultado positivo, a nivel interno la ecuación tiene que considerar de todos modos un ingrediente fundamental, la satisfacción del equipo de trabajo. Y para llegar a ella, el diálogo muestra todo su potencial, ya que permite el intercambio de visiones e ideas para conocer el sentir de todos aquellos que contribuyen con su talento y expertise a la producción de una empresa.
Aunque se trata de un componente subjetivo, la satisfacción del equipo requiere mucha atención y cuidado, ya que incide directamente en su motivación y, como consecuencia, en su rendimiento y sentimiento de pertenencia así como en el ambiente laboral de la compañía.
¿Por qué el diálogo es importante?
Para alcanzar niveles efectivos de satisfacción al interior de una empresa, lo principal es generar instancias para que el enfoque de mejora continua considere el diálogo como elemento clave.
Estas instancias permitirán conocer los elementos que inciden en la motivación del equipo de trabajo, por lo que existen tres preguntas imprescindibles para fomentar el diálogo que, a su vez, entregará información de calidad para la toma de decisiones que busquen la satisfacción del grupo humano que compone la empresa: ¿qué debemos hacer?, ¿qué debemos seguir haciendo? y ¿qué debemos dejar de hacer?
¿Cómo desarrollar el diálogo?
Abrirle la puerta al diálogo es sencillo. Tanto en situaciones de normalidad como en aquellas donde se vislumbra una crisis o hay una en pleno desarrollo, el diálogo necesita un espacio.
Las encuestas de clima laboral suelen entregar datos útiles, pero son poco flexibles al apartarse de la comunicación directa, del tú a tú.
Eso sí lo tiene el diálogo. Y, para generarlo, es importante fomentar conversaciones fluidas y abiertas entre los jefes y sus equipos, donde se puedan exponer puntos de vista y que éstos permitan enriquecer la información necesaria para la toma de decisiones al interior de las empresas.
Beneficios del diálogo
Visto como un factor de cambio y corrección, el diálogo es una forma de modificar las dinámicas negativas existentes, ya que su práctica permite reconocer las cosas que requieren modificaciones, buscando acuerdos y haciéndole saber a los trabajadores que existe voluntad real de mejorar por parte de la empresa, con una política de puertas abiertas, donde la voz de todos es tomada en cuenta.
El diálogo fomenta la capacidad de escuchar y ser escuchado, generando el clima adecuado para que fluyan las ideas de cómo mejorar interacciones, procesos y otros aspectos que inciden directamente sobre el clima laboral y, por consecuencia, la satisfacción del equipo.
Esto se produce porque el equipo se siente valorado cuando su opinión es tomada en cuenta. Eso aumenta su motivación y lo hace partícipe de la toma de decisiones.
Cuidado con las falsas expectativas
El diálogo supone una oportunidad para exponer situaciones y genera una genuina expectativa de que las cosas pueden cambiar para mejor.
Por esa razón, la responsabilidad es fundamental. Es importante que del diálogo surjan soluciones. Sin embargo, es necesario que todos comprendan que hay cambios que tomarán más tiempo que otros en concretarse. El manejo correcto de las expectativas será lo que permita encauzar las cosas por la vía adecuada, evitando la frustración.
Apostar por el diálogo resulta ser un mecanismo muy potente para fortalecer el ambiente laboral. Es un recurso que democratiza la organización. Y si se conduce de manera responsable, permite apuntar a una transformación donde la motivación del equipo humano puede alcanzar niveles muy altos, lo que se traduce en satisfacción, retención de talentos y mayor productividad y sentimiento de pertenencia.
Fuente: Robert Half, diciembre 11 de 2019