Tras ser convocados por el Ministerio de Hacienda, expertos de distintas sensibilidades políticas y trayectorias formularon un documento de 19 páginas con medidas para enfrentar el impacto del covid-19.
«Un grupo importante de economistas, expertos de nuestro país de distintas sensibilidades y que han tenido altas responsabilidades en el sector público y privado«. Así definió el senador Jorge Pizarro a los autores de una nueva propuesta económica para enfrentar la crisis del covid-19 y que fue presentada ayer a la comisión ampliada de Hacienda, donde se discute un plan de emergencia con el Gobierno.
Se trata de un documento de 19 páginas, cuyo contenido se evaluó entre un grupo transversal de 16 economistas convocados por el Ministerio de Hacienda, los que se reunieron durante una semana y media vía zoom para trabajar. En el grueso, el texto se basa en tres ejes de acción: un marco fiscal de referencia, la emergencia y la reactivación.
Para la implementación de la propuesta se plantea la creación de un fondo de un máximo de US$12 mil millones para los próximos 24 meses, por sobre los US$10 mil millones que considera la actual proposición del Gobierno. Con ello, se apunta, entre otras cosas, a mejorar el Ingreso Familiar de Emergencia a una cifra per cápita entre $80 mil y $90 mil.
Pero ¿quiénes son los expertos detrás del texto? Todos, ingenieros comerciales de la PUC o de la Universidad de Chile, la mayoría con postítulos en universidades estadounidenses y muchos con un pasado ligado a gobiernos de distintos colores políticos.
Los 16 economistas autores de la propuesta
- Rafael Aldunate
Ingeniero comercial de la PUC y AMP de Harvard. Tiene una extensa trayectoria en directorios de empresas y desde hace 13 años se desempeña como director de Parque Arauco. Fue director de ProChile, gerente general de la Bolsa Electrónica, ex vicepresidente de Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) y miembro del la comisión económica de Renovación Nacional. También es autor de tres libros y actual columnista de economía internacional de La Segunda.
- Rodrigo Cerda
Ingeniero comercial y magíster en Macroeconomía Aplicada de la PUC, cuenta además con un magíster y un doctorado de la Universidad de Chicago. Actualmente se desempeña como economista en Clapes UC, académico de la Facultad de Derecho de la PUC y director de Codelco, cargo que entró a ocupar tras la salida de Ignacio Briones para asumir como ministro. Antes del cambio de gabinete, Cerda era director de Presupuestos del Ministerio de Hacienda. En su trayectoria se ha destacado por sus numerosas publicaciones dedicadas a temas de macroeconomía, política fiscal, pensiones y seguros de desempleo.
- Vittorio Corbo
Ingeniero comercial de la Universidad de Chile, doctorado y postdoctorado en economía del MIT. Fue presidente del Banco Central de Chile (2003-2007), miembro del Consejo Asesor del economista jefe del Banco Mundial y miembro del Consejo Consultivo sobre política monetaria y cambiaria del Fondo Monetario Internacional. Ha publicado y editado 11 libros y más de 100 artículos en revistas especializadas. Actualmente es director de CCU S.A., asesor económico y miembro del Consejo Directivo del Centro de Estudios Públicos (CEP).
- José de Gregorio
Ingeniero civil industrial y magíster en ingeniería de la Universidad de Chile; posteriormente obtuvo su doctorado en el MIT. Fue presidente del Banco Central (2007-2011) tras haber sido vicepresidente (2003-2007) y consejero (2001-2003) del ente rector. Entre marzo del 2000 y junio de 2001 fue triministro de las carteras de Economía, Minería y Energía. Durante su trayectoria ha sido consultor de organismos como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, la OCDE y empresas extranjeras, también fue investigador del FMI. Actualmente es académico y decano de la FEN de la U. de Chile.
- Álvaro Díaz
Ingeniero comercial y Sociólogo de la Universidad de Costa Rica y doctor en Economía de la Universidad de Campinas, Brasil. Fue subsecretario de Economía (2000-2005), embajador de Chile en Brasil (2007-2010) y economista de la Cepal. Su expertise son las políticas de competitividad, innovación y desarrollo tecnológico. Actualmente es economista del Consejo de Innovación para el Desarrollo (CNID).
- Sebastián Edwards
Ingeniero comercial de la PUC, máster y doctor en Economía de la Universidad de Chicago. Fue economista jefe para América Latina y el Caribe del Banco Mundial y también investigador asociado del National Bureau of Economic Research. Ha escrito más de 200 artículos sobre economía internacional, macroeconomía y desarrollo en destacadas revistas internacionales. Además, es autor de más de 20 libros sobre temas relacionados. Ha sido consultor de numerosas empresas e instituciones multilaterales. Actualmente vive en Estados Unidos y es académicos de la UCLA.
- Juan Andrés Fontaine
Ingeniero comercial de la PUC y máster en Economía de la Universidad de Chicago. Fue ministro de Economía durante los años 2010 y 2011; en el actual Gobierno se desempeñó como titular de Obras Públicas y posteriormente como ministro de Economía. Ha participado como investigador del Centro de Estudios Públicos (CEP) y consejero del Instituto Libertad y Desarrollo. Fue director de Estudios del Banco Central y se ha destacado por ser profesor en la Universidad de Chile, la PUC y la Universidad de Los Ángeles.
- Bettina Horst
Ingeniera comercial y máster en Economía con mención en políticas públicas de la PUC. Se ha desempeñado como investigadora y gerenta general en Libertad y Desarrollo. Fue Senior Fellow en Atlas Economic Research Foundation en Washington DC y jefa del área monetaria del Departamento de Estudios del Banco Central en Chile. Actualmente es directora de Políticas Públicas de LyD y consejera del sistema de Alta Dirección Pública, también integra el consejo del Sistema de Empresas Públicas y es miembro del consejo estadísticos asesor del INE.
- Sebastián Izquierdo
Ingeniero comercial de la Universidad de Chile y magíster en Políticas Públicas. Ex superintendente de Educación y ex analista de los Ministerios de Economía y Hacienda. Actualmente es director ejecutivo del Centro de Estudios Horizontal.
- Claudia Martínez A.
Ingeniera comercial de la Universidad de Chile, magíster y doctorada en la Universidad de Michigan. Ha trabajado como asesora del Ministerio de Hacienda y también se desempeñó como economista en el Banco Interamericano de Desarrollo. Actualmente es académica de la Facultad de Economía y Administración de la PUC.
- Andrea Repetto
Ingeniera comercial y magíster en Economía de la PUC; doctora en Economía del MIT. En su trayectoria se ha destacado por estudiar temas como economía y psicología, economía de la educación, pobreza, economía laboral y crecimiento y productividad. Fue presidenta de la Comisión de Usuarios del Seguro de Cesantía y ha sido miembro del Consejo Asesor Presidencial de Trabajo y Equidad Social y del Consejo Asesor Presidencial para la Reforma Previsional. Actualmente es académica de la Escuela de Gobierno de la UAI y directora de Espacio Público.
- Claudia Sanhueza
Ingeniera comercial de la Universidad de Chile y doctora en Economía de la Universidad de Cambridge. Fue presidenta del Consejo Consultivo Previsional y miembro del Panel de Expertos Casen 2015 y 2017, integrante del directorio de la Fundación Nacional para la Superación de la Pobreza y del Laboratorio de investigación e innovación en Educación para América Latina y el Caribe. Actualmente es académica de la Universidad Mayor, directora del Centro de Economía y Política Social, y también investigadora adjunta del Centro de Conflicto y Cohesión Social (COES).
- Klaus Schmidt-Hebbel
Ingeniero comercial y magíster en Economía de la PUC; doctor en Economía del MIT. En su extensa trayectoria como asesor económico de organismos nacionales e internacionales, se ha desempeñado como economista principal del Departamento de Investigación del Banco Mundial, gerente de Investigación Económica del Banco Central de Chile y como economista jefe de la OCDE. Actualmente es consultor, asesor, conferencista internacional, y director de empresas, fundaciones y ONGs. A su vez, se desempeña como profesor titular de Economía de la PUC.
- Cristián Solis de Ovando
Ingeniero comercial y máster en Ciencias Políticas de la Universidad de Chile. Fue gerente general de la Bolsa de Comercio de Santiago y socio y presidente del comité ejecutivo de KPMG Chile. Ha liderado importantes transacciones en el mercado de capitales de Chile y Latinoamérica, y ha gestionado múltiples negociaciones de empresas. Actualmente es director de varias compañías.
- Rodrigo Valdés
Ingeniero comercial de la Universidad de Chile y doctor en Economía del MIT. Sus áreas de investigación incluyen economía monetaria, finanzas internacionales y finanzas públicas. Fue ministro de Hacienda (2015-2017) y presidente de BancoEstado. Se desempeñó como director de investigación y economista jefe del Banco Central de Chile, donde también fue economista senior. Previamente fue asesor principal del Ministro de Hacienda y ha sido consultor del FMI y el BID, y ha enseñado economía en la Universidad de Chile y en la Universidad de Santiago. Actualmente es académico de la Escuela de Gobierno de la PUC.
- Rodrigo Vergara
Ingeniero comercial de la PUC y doctor en Economía de la Universidad de Harvard. Fue presidente del Banco Central de Chile entre 2011 y 2016, y consejero de la misma entidad desde 2009 a 2011; años antes también llegó a ser economista jefe del ente rector. Durante su trayectoria se desempeñó como coordinador de macroeconomía en el Centro de Estudios Públicos, entidad en la que actualmente se desempeña como investigador senior. Es asesor y director de diversas empresas y ha sido consultor para distintos gobierno e instituciones internacionales.
Fuente: Emol economía, junio 11 de 2020
Entidad desarrolló una plataforma que permite apoyar a empresas en la aplicación de medidas para proteger a trabajadores ante el posible contagio.
La crisis sanitaria, incluida las extendidas cuarentenas y el persistente aumento de los contagios, le ha puesto una alta presión a la posibilidad de que la economía se active en su totalidad. Desde la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) quisieron involucrarse en el tema, pero desde el punto de vista de velar por la correcta protección de los trabajadores, en un escenario en el cual paulatinamente las compañías buscarán retomar sus operaciones presenciales.
«Debemos estar preparados para que, cuando sea necesario, las empresas en conjunto con la sociedad vayan retornando a una actividad productiva compatible con la pandemia», explican desde la entidad.
Lo que consideran como una necesidad del país, también asumen que es un «gran reto». El punto, destacan, es «ver maneras de compatibilizar un nivel de actividad operacional de las industrias y empresas que permitan mantener el empleo y la actividad económica, con los desafíos de salud que presenta una pandemia que sabemos es peligrosa».
Por esta razón, un equipo de la ACHS desarrolló una plataforma que consiste en un listado de verificación de implementación de medidas y de mejores prácticas que permiten mitigar el riesgo de contagio al interior de las firmas, en función de las definiciones que ha emitido la autoridad sanitaria y recomendaciones de la propia institución.
«Todo se elabora en base a la información que las propias empresas nos entregan, y en base a eso se les señala qué aspectos deben mejorar», explica el gerente división seguridad y salud ocupacional de la ACHS, Andrés Herreros.
¿Qué se ha hecho?
La plataforma divide las recomendaciones y/o ejes a trabajar en nueve puntos: organización y responsabilidades; comunicación y capacitación; continuidad operacional; medidas de prevención y control; limpieza y desinfección del centro de trabajo; gestión de trabajadores contagiado o en proceso de evaluación; atención a público; delivery; y recolección de residuos domiciliarios.
«La idea es que las empresas se vayan midiendo semana a semana para poder ir viendo cuál es su nivel de avance de estas obligaciones y recomendaciones de seguridad social», agrega Herreros.
De acuerdo con los datos de la ACHS, a la fecha más de 250 lugares de trabajo han implementado la herramienta y han reportado una gestión esperanzadora.
En promedio, según lo señalado por las firmas, aproximadamente un 70% de las medidas recomendadas ya han sido implementadas.
Respecto de acciones de protección relacionadas al modo en que se desarrolla la jornada, un 78% de los encuestados ha flexibilizado horarios y un 91% ha implementado sistemas de teletrabajo.
Sobre las medidas en el lugar de trabajo mismo, un 86% ha restringido las actividades grupales, cifra similar al 86% donde se registra la temperatura de los colaboradores al ingreso.
«Esto es trabajo seguro y no retorno seguro porque, en primer lugar, hubo empresas que nunca pararon. Es decir, los procesos productivos clave para el país siguieron operando, cambiaron su modalidad, pero siguieron trabajando. Hay otros, en tanto, que por la naturaleza de lo que hacen pararon sus funciones, pero que en algún momento tendrán que retomarlas, por esa razón nos parece más correcto hablar de trabajo seguro», dice Herreros.
Fuente: Diario Financiero, junio 10 de 2020
La economía global se reduciría 6% este año si la pandemia sigue su curso, pero con una nueva ola la caída llegaría a 7,6%.
Es tal el nivel de incertidumbre provocado por la pandemia del coronavirus que, de manera extraordinaria, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) decidió estimar dos escenarios posibles en su informe de Perspectivas Económicas publicado hoy.
El primero contempla que el Covid-19 continúa retrocediendo y permanece bajo control, mientras que el otro plantea que un segundo brote surge durante 2020. “Ambos escenarios son sombríos, ya que la actividad económica no vuelve ni puede volver a la normalidad en estas circunstancias”, advierte el texto.
Para Chile, el organismo internacional prevé que si la pandemia sigue su curso actual, el Producto Interno Bruto (PIB) del país se contraería 5,6% este año, para empezar a mejorar desde el tercer trimestre y así lograr crecer 3,4% en 2021. Pero de producirse un nuevo brote del virus, la economía nacional se desplomaría 7,1% en 2020, para recién comenzar a repuntar el próximo año y expandirse sólo 1,9%.
El mejor escenario es más pesimista que la previsión de esta semana del Banco Mundial, de una caída de 4,3% para el PIB, y también que la del Fondo Monetario Internacional, que en abril estimaba una contracción de 4,5%.
La fuerte desaceleración de las exportaciones, el efecto negativo de las cuarentenas en el consumo, empleo e incertidumbre, y de los efectos del coronavirus en Estados Unidos y China son algunos factores que justifican la proyección.
Las manifestaciones sociales de octubre del año pasado ya habían afectado el crecimiento nacional, pero al sumarle la pandemia y la caída de los precios de las materias primas, la economía chilena sufrirá la recesión más profunda desde 1982, según la OCDE.
Aunque el informe destaca los paquetes de estímulo fiscal y monetario sin precedentes impulsados por las autoridades locales, advierte que de ser necesario, deberán intensificarse las medidas. “Gracias al espacio fiscal existente, deben reforzarse aún más las medidas de apoyo a las empresas, sobre todo a las PYME, y las transferencias a las familias más vulnerables para estimular una recuperación inclusiva y evitar un efecto adverso prolongado en el empleo, la pobreza y la desigualdad”, recomienda.
Grandes economías
Si no se produjeran rebrotes hasta fin de año, el organismo estima que el PIB mundial caería 6% este año y que lograría crecer 5,2% en 2021. Pero de reactivarse los contagios, la economía global se desplomaría 7,6% en 2020 para repuntar tibiamente a 2,8% el año entrante.
“A fines de 2021, la pérdida de ingresos superaría la de cualquier recesión anterior en los últimos 100 años fuera de tiempos de guerra, con consecuencias nefastas y duraderas para las personas, las empresas y los gobiernos”, advierte el informe.
Las grandes economías se verán, de una u otra forma, fuertemente afectadas por la pandemia. En el mejor de los casos, EEUU experimentaría una contracción de 7,3% este año, pero en el escenario negativo su Producto se hundiría 8,5%.
En Europa, Francia, España e Italia experimentarían caídas de más de 11% de su PIB si la pandemia sigue su curso, pero de producirse un nuevo brote las caídas superarían el 14% para las tres economías. El Producto de Alemania, en tanto, se contraería 6,6% si no hay nuevas infecciones, pero 8,8% si hay nuevos casos.
Panorama latinoamericano
Chile sería el país menos impactado de los sudamericanos que pertenecen a la OCDE. Argentina sería el más afectado: su economía caería 8,3% si no se produce un segundo brote, pero se contraería 10,1% de haberlo. El PIB de México caería 7,5% si la pandemia sigue su curso, pero se hundiría 8,6% de producirse nuevos contagios.
El Producto de Brasil, en tanto, se reduciría 7,4% si el virus se mantiene bajo control, pero se desplomaría 9,1% si se generan nuevas infecciones. Y Colombia, por su parte, vería una caída de 6,1% de su PIB, la que podría llegar a 7,9% si hay un segundo brote de Covid-19.
Fuente: Diario Financiero, junio 10 de 2020
Un 93% de las empresas metalúrgicas metalmecánicas han logrado mantenerse operativas durante la pandemia, de las cuales un 88,4% no se han acogido a la Ley de Protección del Empleo, según lo reveló una encuesta realizada por el organismo gremial que las agrupa, ASIMET.
Según el presidente del gremio, Dante Arrigoni “este bajo porcentaje de empresas de nuestro sector que se acogieron a esta ley, y que es de 11,6%, confirma que la industria manufacturera chilena, a pesar de la grave crisis sanitaria y de nuestras dificultades históricas, sigue siendo un pilar fundamental en la economía de nuestro país”.
El estudio arrojó, además, que las empresas que redujeron las dotaciones de sus trabajadores son un 44,2%, mientras que un 55,8% ha mantenido la totalidad de los empleos que tenían previo al inicio de la crisis sanitaria.
“Somos un gremio en la manufactura que trabajamos con personal altamente calificado y uno de los que genera mayor mano de obra, por eso es importante que las autoridades valoricen a la industria nacional, sobre todo una vez que esta pandemia haya concluido”, sostuvo Arrigoni.
Agregó que “el promedio de reducción de trabajadores entre todas las empresas que tuvieron que disminuir su personal es de un 16,5%, una de las tasas más bajas del país en comparación a otros sectores de la economía”.
En lo que respecta a la modalidad del teletrabajo, el dirigente empresarial informó que un 90,7% de las industrias están operando bajo esta modalidad, en un promedio de 29,3% de la dotación total de colaboradores.
Frente a la pregunta si continuarán con esta modalidad de trabajo, un 48,8% de las empresas dijo que sí, mientras que un 51,2% lo descartó una vez que termine la crisis sanitaria. “Eso significaría, en promedio, que un 16,7% de los trabajadores podrían continuar en el futuro desarrollando sus actividades laborales a través del teletrabajo”, indicó.
En relación a las ventas, la muestra indicó que un 88,4% de las empresas proyectan un impacto negativo en este ítem para el segundo semestre, con una caída promedio de 27,6%.
Créditos Covid 19 aumentan
Arrigoni señaló como positivo que, pese a la lentitud con que el sistema bancario ha operado para entregar a las empresas los créditos Covid 19, en el sector metalúrgico metalmecánico se ha evidenciado un avance. Indicó que a la fecha un 34,9% ya lo ha recibido y un 65,1% no. Comparativamente esta cifra es superior a la de la encuesta anterior, realizada en abril, donde solo un 19,4% había recibido este financiamiento, y un 80,6% estaba a la espera.
Agregó que un 45,0% recibió el financiamiento por el monto solicitado y un 55% por uno inferior. “Esto significa aproximadamente el equivalente a 1,7 veces el promedio de meses de ventas para quienes recibieron el crédito Covid 19”, concluyó el presidente de ASIMET.
Fuente: Diario Estrategia, junio 08 de 2020
Cartas al Director (Diario Financiero)
Junio 05 de 2020
Señora Directora:
El IMACEC de -14,1% de abril pasado fue un duro golpe para las esperanzas de quienes creían que los efectos negativos de esta pandemia no se reflejarían en la magnitud que acaba de ocurrir. En este escenario, que la industria metalúrgica metalmecánica haya mostrado el menor descenso de -1,1% pudo parecer una sorpresa para muchos, salvo para nuestro gremio, que desde hace varias décadas se viene desarrollando en contextos muy adversos.
Desde que se decretara la cuarentena en la Región Metropolitana, un 93,3% de nuestras industrias se mantienen activas, y un 56,7% de las empresas no ha reducido sus dotaciones de colaboradores. Esto representa, en relación a otros sectores productivos, un esfuerzo gigantesco, en el que diariamente debemos lidiar aplicando rigurosos protocolos sanitarios en nuestras plantas, pero además en el límite del financiamiento por la falta de ejecución de los bancos para tramitar los créditos Covid-19.
Somos un sector que entrega al país empleos de calidad y calificados que en estos dramáticos momentos debemos preservar, pero este esfuerzo debe ser global –público y privado-, para poder mantener la capacidad productiva. Sin duda, cualquier plan de reactivación para superar la crisis debe considerar a la industria manufacturera como plataforma clave para retomar el crecimiento.
Dante Arrigoni C.
Presidente ASIMET
El Ministerio de Energía informó que a contar del 1 de junio volvió a entrar en operación el «horario límite de invierno» en las cuentas de electricidad en todo el país, medida que había quedado suspendida durante los meses de abril y mayo por la pandemia de coronavirus.
Según informó el organismo, la medida implica que los hogares del país tendrán un tope de 430 kWh mensual, y que, si se exceden de este, se cobrará un delta extra a la cuenta con la empresa respectiva.
No obstante, aclararon que los 430 kWh refieren a un consumo promedio en lo hogares, cuyo monto es de $50.000 aproximadamente.
Asimismo, desde la cartera indicaron que para las empresas la medición es diferente, puesto que a estas se les agrega un horario específico de mayor demanda.
Específicamente, las empresas que sobrepasen su límite entre las 18:00 y 22:00 horas deberán pagar un sobreconsumo.
El ministerio también hizo un llamado a racionalizar el uso de la energía, considerando el mayor uso que está haciendo la ciudadanía por la situación sanitaria.
Recordar que el Gobierno retrasó la puesta en marcha de esta medida, dejando sin efecto la misma en los meses de abril y mayo por la mayor cantidad de personas que se mantendrían en sus casas por el inicio de la emergencia sanitaria.
«La medida adoptada por el Gobierno se refiere a la eliminación del cobro durante abril y mayo del “límite de invierno” para los hogares y el considerar a estos mismos meses como de punta para las pymes y comercios, en caso de que esto les sea beneficioso», sostuvo el ministerio en abril pasado.
Consignar que la iniciativa busca fomentar una racionalización del consumo eléctrico en los hogares de todo el país.
Fuente: 24horas.cl, junio 03 de 2020
Según detalló la Superintendencia de Pensiones, son 96.220 empresas las que han solicitado hacer uso de la medida.
La Superintendencia de Pensiones (SP) dio cuenta este miércoles de un nuevo registro semanal referente a las solicitudes y aprobaciones para acogerse a la Ley de Protección del Empleo, nuevamente mostrando un alza en la cifra de empresas que han decidido hacer uso de la normativa.
Con datos al 31 de mayo pasado, el número de trabajadores acogidos a la ley subió de 555.002 -contabilizados hasta el 22 de mayo- hasta 591.844, es decir, un alza del 7%. Mientras que 96.220 empresas han solicitado usar la medida, hasta esa fecha.
En cuanto al tipo de contrato de los trabajadores con solicitudes aprobadas, la SP detalló que 505.213 mantienen contratos indefinidos, mientras que 86.631 son a plazo fijo.
Del total de empresas que han hecho uso de la normativa, el 76,6% corresponde a micro (con 10 o menos trabajadores), 18,2% a pequeñas (entre 11 y 49 trabajadores), 3,4% a medianas (entre 50 y 199 empleados), y el 1,2% fueron empresas grandes, es decir, que mantienen entre 200 o más trabajadores. Para el 0,6% restante, no hay información.
Por número de trabajadores la distribución cambia, ya que el 31% del total de colaboradores acogidos a la normativa corresponden a grandes empresas, le siguen las micro (26,8), las pequeñas (26,3%) y las medianas (15,9%).
Tal y como ha sido la tendencia, el comercio, la construcción y los servicios de alojamiento y comida son los sectores que más han utilizado la ley, representando el 23%%, 18,7% y 18,7%, respectivamente. La suma de los tres acumulan más de la mitad de las solicitudes aprobadas, al totalizar 360.678 trabajadores adheridos.
Por último, sobre las solicitudes aprobadas para hacer uso del Seguro de Cesantía, la superintendencia expuso que entre el 4 y 29 de mayo se visaron 128.523 de estas peticiones, un 1,4% más en el mismo periodo del año pasado.
Y en el año, se han aprobado 640.121 de estas solicitudes para hacer uso del seguro, un 4,6% más que en la misma fecha del año pasado.
Fuente: Emol economía, junio 03 de 2020
Comunicado de prensa:
Sector Metalúrgico-Metalmecánico cae solo un 1,1% en abril
Al comentar la cifra, el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, señaló que “nuestras empresas llevan mucho tiempo trabajando en condiciones difíciles, por lo que sabemos reaccionar a la adversidad”, no obstante adelantó que en los próximos meses el impacto se hará sentir con mayor fuerza.
El sector metalúrgico metalmecánico fue uno de los que mostró mejor comportamiento durante el mes de abril, al registrar un descenso de solo un 1,1%, muy por encima del IMACEC de este mismo periodo, que mostró una caída histórica de 14,1%, como consecuencia de la pandemia mundial del coronavirus.
Según el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, esta caída del rubro no fue tan violenta, porque el sector logró reaccionar con prontitud en sus plantas e industrias e implementar medidas sanitarias adecuadas, que han evitado un impacto tan alto en los procesos productivos.
Agregó que, antes de la pandemia, “nuestra industria ya debía competir en condiciones de desigualdad e inequidad de productores extranjeros, por lo que llevamos mucho tiempo trabajando en condiciones difíciles, por lo que sabemos reaccionar a la adversidad. Es por ello que hoy mostramos resultados que están muy por sobre otros sectores de la economía, por lo que sin duda, cualquier plan de reactivación para superar la crisis debe considerar a la industria manufacturera como plataforma clave para retomar el crecimiento”, sostuvo.
El dirigente empresarial informó que con este resultado de abril el sector acumula en los primeros cuatro meses del año un crecimiento de 4,6%.
“Esta cifra es notoriamente más baja que los resultados que acumulaba al primer trimestre, periodo en el cual el sector exhibía un ascenso de 6,6%, lo cual hace prever que cerraremos el año 2020 con cifras negativas”, proyectó Arrigoni.
Los subsectores que componen el sector metalúrgico metalmecánico con mejor desempeño en el cuatrimestre del año son: fabricación de maquinaria de uso especial, con un aumento acumulado en dicho periodo de 32,9%, lo cual aportó 5,2 puntos de crecimiento al sector. Le sigue fabricación de productos metálicos para uso estructural, tanques, depósitos, recipientes de metal y generadores de vapor, con una variación positiva de 7% y un aporte de 1,7 puntos porcentuales (pp) al sector.
Por su parte, los subsectores de más bajo desempeño se encuentran en fabricación de maquinaria de uso general, con un retroceso en sus niveles de producción de 28,3%, restando 2,1 pp al sector, y fabricación de aparatos de uso doméstico, con una caída de 31% lo cual restó 1,1 pp al desempeño del sector metalúrgico-metalmecánico.
Finalmente, Arrigoni señaló la importancia que revestirá que una vez que Chile haya superado esta pandemia y comience la recuperación de las actividades productivas, “las autoridades generen un plan de reindustrialización que nos permita enfrentar los desafíos que tendremos como país y porque está demostrado que nuestro sector es el que genera mejores y mayores empleos”.
Dante Arrigoni C.
Presidente de ASIMET
Junio 01 de 2020
La cifra fue mucho peor a la anticipada por el consenso del mercado.
La economía chilena sufrió una contracción sin precedentes en abril de este año, debido al fuerte impacto que ha tenido en la economía la paralización de varias actividades, debido a las cuarentenas, para contener la expansión del covid-19 en el país.
Según informó el Banco Central, el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) del cuarto mes del año se hundió -14,1% en comparación con igual mes del año anterior. Se trata de la primera medición que da cuenta en su totalidad del efecto de la pandemia en la economía.
La serie desestacionalizada disminuyó 8,7% respecto del mes precedente y 12,4% en doce meses. El mes registró la misma cantidad de días hábiles que abril de 2019.
Se trata de una cifra mucho peor a la estimada por el mercado. La media de 14 economistas encuestados por Bloomberg preveía que la economía se contrajera 11% a/a en el mes.
En el detalle del reporte del Central, el Imacec minero disminuyó 0,1%, mientras que el no minero lo hizo en 15,5%. «El resultado de este último se vio impactado por los efectos de la emergencia sanitaria. En este contexto, las actividades más afectadas fueron los servicios y el comercio, y, en menor medida, la construcción y la industria manufacturera», indicó la entidad.
En los servicios, destacaron las caídas de educación, transporte, restaurantes y hoteles y servicios empresariales. En términos desestacionalizados, y con respecto al mes anterior, el Imacec minero creció 0,9% y el no minero cayó 9,7%.
De acuerdo a los registros históricos del Banco Central, la medición del Imacec sólo se aprecia hasta 1986, por lo una cifra tan negativa para un mes en particular sólo podría haberse registrado 1982 cuando la economía chilena se contrajo 11% o en 1975, cuando el PIB se desplomó 12,9%.
Por último, el instituto emisor señaló que considerando los desafíos que la crisis sanitaria ha impuesto sobre la recolección de datos básicos, «el Banco Central de Chile ha hecho esfuerzos adicionales con sus proveedores de información para minimizar el impacto en la calidad de las estadísticas. Sin embargo, es relevante señalar que las cifras entregadas en esta oportunidad podrían estar sujetas a mayores revisiones que las registradas históricamente«.
Fuente: Emol economía, junio 01 de 2020
Según el Centro de Microdatos de la U. de Chile, la cifra representa un total de 469.284 desempleados.
El Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, informó que la tasa de desempleo en el Gran Santiago subió con fuerza hasta un 15,6%, ante el impacto de la pandemia en la economía del país.
La cifra representa una alza de 8 puntos porcentuales en relación al mismo periodo del año pasado y de 6,8%, respecto a la medición de diciembre.
469.284 son las personas desocupadas en el Gran Santiago, es decir, 1,6 veces más que hace doce meses
Con todo, se trata del mayor nivel en 35 años (en junio 1985 fue 15,7%) y sobre el promedio de las últimas dos décadas (9,5%).
Este incremento, según el organismo, «responde fundamentalmente a una caída del empleo total de 15,5% sumado a una disminución de la fuerza de trabajo de 7,5%».
Al desagregar por género se observa que el empleo masculino se ubicó en 16,1%, que significa un aumento de 8,6 puntos porcentuales (pp) en el último año, mientras el empleo femenino llegó a 14,9%, un alza anual de 7,1 pp. Asimismo, las personas del grupo etario entre 25 a 54 años exhiben una tasa de desempleo de 15,4%.
Según el análisis del CMD, del total de desocupados un 94,6% corresponde a cesantes, o sea personas que han trabajado anteriormente con remuneración. En el mismo período, el empleo asalariado disminuyó 12,3%, mientras el empleo independiente se redujo en 24,9%.
En el análisis del Centro de Microdatos por rama de actividad económica, las bajas en el empleo en orden decreciente fueron Comercio (23,3%), Construcción (22,0%), Servicios comunales y sociales (16,0%), Transporte, comunicaciones y servicios de utilidad pública (13,0%), Servicios de Gobierno y financieros (12,9%) y Servicios personales y de los hogares (9,8%), mientras que la Industria manufacturera presentó un alza leve de 1,4%.
Los datos fueron recolectados telefónicamente en todas las comunas del Gran Santiago entre el jueves 16 de abril y el domingo 17 de mayo de 2020, utilizando como período de referencia la semana comprendida entre el domingo 29 de marzo y el sábado 4 de abril de 2020.
Zaldívar prevé desempleo de 10% a nivel nacional
Más temprano en entrevista con radio Duna, la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, adelantó que en Chile ya habría una tasa de 10% de desempleo a nivel nacional.
«Lo vamos a tener con claridad cuando el INE entregue sus datos, que será en los próximos días, porque puede ser que dentro de esas 500 mil cartas de despidos que yo señalo, haya algunos que hayan decidido no seguir buscando trabajos y hayan otros que sí hayan encontrado trabajo en este periodo», indicó.
«Pero vamos a estar sobre el millón (de personas desempleadas), que significa aproximadamente un 10%«, afirmó y añadió que «justamente tenemos que trabajar para evitar que estos dos dígitos sean más abultados, no es lo mismo un 10% que un 18%».
Fuente: Emol economía, mayo 27 de 2020