La CNEP entregó este miércoles su informe anual, estimando una caída de entre 3,4% y 3,6% de la productividad el año recién pasado.
La Comisión Nacional de Evaluación y Productividad (CNEP) presentó hoy la séptima edición de su informe anual y señaló que, de acuerdo con su metodología, la Productividad Total de Factores (PTF) en el país anotó una profunda caída de entre 3,4% y 3,6% en 2022, mientras que la baja sin minería fue de entre 2,1% y 2,4%.
Con esto, explicaron desde la entidad, se revirtieron en parte las ganancias en productividad observadas durante la pandemia, evidenciando una normalización posterior al anómalo incremento observado en 2021, producto de las condiciones excepcionales en las que se desenvolvió la economía desde la irrupción del covid-19.
De esta forma, desde el año 2000 en adelante, y conforme a las mediciones de la CNEP, se constata una desaceleración sostenida de la productividad en Chile, con una contribución al crecimiento promedio anual de tan solo 0,1%.
Sobre el punto, el presidente de la CNEP, Raphael Bergoeing, explicó que «en la década de 1990, el crecimiento promedio anual de la productividad estuvo en torno a 2,3%. Hipotéticamente, de haberse mantenido este ritmo, el país tendría un nivel de ingreso per cápita superior al actual en un tercio».
Y recordó que «la mayor productividad de un país permite tener salarios reales más altos y mayores ingresos fiscales que financian más y mejores servicios públicos. Esto habilita a las personas a tener acceso a más tiempo libre y a bienes más variados, de mejor calidad y a menores precios. Adicionalmente, una mayor productividad permite generar mayor producto con el mismo nivel de insumos, lo cual resulta ser relevante dada la actual discusión sobre reducir las horas laborales a 40 horas semanales».
¿Por qué cayó la productividad en 2022?
En cuanto a los factores detrás del retroceso, Rodrigo Krell, secretario ejecutivo de la CNEP, resaltó el cese transitorio de funcionamiento (y posterior retorno) de empresas de baja productividad -como, por ejemplo, las ubicadas en los sectores construcción y turismo, y las de menor tamaño-, fenómeno que también ocurrió en otros lugares, como Estados Unidos.
Bajo esta hipótesis, las empresas y trabajadores que permanecieron activos en este período fueron los de mayor productividad, contribuyendo a aumentar la PTF.
Detalló que en el caso de la actividad empresarial, a partir de marzo de 2020 se registraron 100 mil empresas menos funcionando -principalmente micro y pymes-, las que dejaron de realizar ventas desde el inicio de la pandemia, persistiendo la cifra hasta septiembre de ese año.
Precisó, además, que «por el lado del empleo, las cifras mostraban que en pandemia hasta 1,7 millones de trabajadores salieron de la fuerza laboral, cifra que hoy se ha reducido a cerca de 500 mil».
«La mayor productividad de un país permite tener salarios reales más altos y mayores ingresos fiscales que financian más y mejores servicios públicos. Esto habilita a las personas a tener acceso a más tiempo libre y a bienes más variados, de mejor calidad y a menores precios. Adicionalmente, una mayor productividad permite generar mayor producto con el mismo nivel de insumos, lo cual resulta ser relevante dada la actual discusión sobre reducir las horas laborales a 40 horas semanales»
Raphael Bergoeing, presidente de la CNEP
«A partir de lo anterior, se estima que el cambio en la composición de las personas que estuvieron en la fuerza de trabajo provoco´ un aumento de la productividad durante la pandemia. Por lo mismo, a medida que las restricciones sanitarias se redujeron y que las ayudas monetarias terminaron, la productividad se vio negativamente afectada con la reincorporación de empleos y la expansión de estos sectores menos productivos», explicó Krell.
Al cerrar el tema de la PTF, el experto enfatizó que «considerando que el PIB registraría hacia el 2027 un bajo crecimiento, cercano al 2,3%, es necesario mantener la implementación de una agenda exhaustiva de reformas pro-productividad».
En cuanto a la productividad sectorial, cuyos datos son para el 2021, dada la disponibilidad de información, mencionó que se observó una recuperación sectorial generalizada, excepto en Electricidad, Gas y Agua.
Efectos de la pandemia
Otro capítulo que contempló esta nueva versión del informe es el relativo a los efectos de la pandemia del coronavirus en el capital humano. Y de acuerdo al análisis realizado por los economistas Josefa Aguirre y Jorge Rodríguez, la situación sanitaria y la política de cierre de escuelas tuvieron un efecto relevante en la materia.
En ese sentido, Bergoeing dijo que la «evidencia comparada para proyectar las posibles consecuencias en las pérdidas en capital humano -habilidades cognitivas- producto del prolongado cierre de escuelas sugiere pérdidas en capital humano significativas para los estudiantes afectados. La magnitud de esta pérdida es mayor para estudiantes de establecimientos municipales y particulares subvencionados, en comparación con el perjuicio para los alumnos de colegios particulares».
«Se proyecta que estas caídas en aprendizaje podrían derivar en caídas en ingresos futuros del 6% para estudiantes de establecimientos municipales y particulares subvencionados y de 4% para los de establecimientos particulares pagados, situación que se puede asociar directamente a una caída en productividad laboral y crecimiento potencial de la economía», apuntó.
Fuente: Emol economía, enero 11 de 2023
A su vez, los envíos de cobre disminuyeron 18% y representaron el 43% del total de exportaciones del país.
Un positivo 2022 anotó el comercio exterior de Chile, registrando crecimiento tanto de exportaciones como de importaciones y dejando una balanza comercial con un superávit de US$2.858 millones.
En total, se registraron US$97.491 en exportaciones, un crecimiento del 3% respecto a 2021 y apuntando su mayor registro histórico. Esto, pese al golpe causado por la caída en valor del cobre, que registró un descenso anual de casi 14% en su precio, lo que llevó a que los envíos retrocedieran 18%.
Con todo, las exportaciones de cobre fueron de US$43.888 millones, representando el 43% del total de envíos del país.
El mal desempeño del cobre llevó a que el sector minero en general anotara un descenso anual de 5,3% en sus exportaciones, lo que fue compensado por el buen rendimiento de los envíos industriales, que registraron US$35.223 millones, un salto de 19,8% respecto a 2021.
Las importaciones, a su vez, también anotaron cifras inéditas según los números del Banco Central, llegando a los US$94.633 millones en 2022, un avance de 12,4% comparado con el ejercicio previo.
Todas las categorías de internaciones lograron crecimiento, destacando los bienes intermedios con US$56.012 millones, un avance de 22,1% respecto a 2021.
Por otra parte, el desempeño de diciembre del año recién pasado confirmó la desaceleración que viene mostrando el sector externo en los últimos meses. Lo envíos cayeron 1% hasta los US$8.895 millones, encadenando el quinto mes seguido de retrocesos.
Las importaciones, en tanto, descendieron 17,7% hasta los US$7.048 millones en diciembre respecto a noviembre, la cifra más baja de 2022.
Fuente: Emol economía, enero 09 de 2023
Según informó el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, con esta cifra la industria acumula seis meses de retroceso en sus niveles de producción, siendo el subsector de industrias básicas de hierro y acero el de más bajo rendimiento, al registrar una caída de 19,9% en los primeros 11 meses del año pasado.
La industria metalúrgica metalmecánica registró en noviembre de 2022 un retroceso en sus niveles de producción de 11,9% en términos anualizados. Esta es la sexta caída consecutiva que marca el sector y la mayor en los últimos 22 meses, cuando tuvo un desempeño de -12,3%, en enero de 2021.
Según informó el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, con el resultado del mes de noviembre la industria metalúrgica-metalmecánica acumuló en los primeros 11 meses del año pasado una caída de 4,2%, cifra que se encuentra en línea con lo proyectado por el gremio, al estimar para 2022 un retroceso de entre 3% y 5% en sus niveles de producción.
Al efectuar un análisis de los subsectores que componen esta industria, Arrigoni señaló que solo 4 de los 9 rubros que la componen tuvieron un desempeño positivo a noviembre de 2022. “Industrias básicas de hierro y acero ha sido el subsector de más bajo desempeño en el último tiempo, al registrar un retroceso de 19,9% en el periodo enero noviembre 2022, restando 2,5 puntos porcentuales de crecimiento a la industria metalúrgica metalmecánica. Lo anterior se origina en una menor producción de ángulos, perfiles, tablaestacas y otros elementos de hierro y acero, producto de una menor demanda del mercado”, explicó.
El subsector con mejor rendimiento entre enero y noviembre de 2022, en tanto, fue el de Fabricación de maquinaria de uso general, con un crecimiento de 20,5% en ese periodo.
Frente a estos resultados de la industria, el presidente de ASIMET recalcó la necesidad de avanzar “con paso firme y decidido hacia la elaboración de una estrategia de desarrollo productivo, que ponga el acento en la reactivación del sector manufacturero, que es el que puede responder y aportar de manera más eficiente y efectiva a la reactivación del país en un escenario de recesión económica”.
En ese sentido, recordó que la manufactura representa “un sector de alta innovación y de mayor crecimiento de productividad que los demás rubros, genera empleos de mayor calidad y mejores remuneraciones, con una menor informalidad y rotación laboral que el promedio nacional, y tiene un rol clave en la disminución de las desigualdades de género en términos de brechas salariales, participación laboral, incorporación de mujeres en actividades de I+D, entre otras”, concluyó.
ASIMET, enero 04 de 2023
La cifra se ubicó dentro de las expectativas de analistas, que apostaban por un descenso de entre 2% y 3,5%.
El Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) de noviembre registró una caída de 2,5% en comparación con igual mes del año anterior, según informó este martes el Banco Central.
Tal como lo esperaba el mercado, con este dato se concretó la tercera caída mensual consecutiva y el mayor retroceso desde febrero de 2021, cuando el país aún sentía el impacto de las restricciones por la pandemia.
Lo que sí, la cifra se ubicó dentro de las expectativas de analistas, que apostaban por un descenso de entre 2 y 3,5%.
Según el ente rector, el resultado del Imacec del penúltimo mes del año recién pasado se explicó por la caída del comercio y la industria manufacturera.
En tanto, la serie desestacionalizada, se contrajo 0,8% respecto del mes precedente y cayó 2,1% en doce meses. El mes registró la misma cantidad de días hábiles que noviembre de 2021.
Así, la disminución del Imacec en términos desestacionalizados fue determinada por el desempeño de la minería, según señaló la entidad que preside Rosanna Costa.
Por otro lado, el Imacec no minero presentó una disminución de 2,2% en doce meses, mientras que en términos desestacionalizados, cayó 0,2% respecto del mes anterior.
Análisis por actividad
La producción de bienes cayó 2,4%, resultado explicado por el desempeño de la industria manufacturera y la minería, las cuales presentaron disminuciones de 6,5% y 3,2% respectivamente.
En contraste, la actividad resto de bienes presentó un crecimiento de 0,7%, incidido principalmente por el valor agregado de la generación eléctrica.
En términos desestacionalizados, la producción de bienes presentó una contracción de 2,3% respecto del mes anterior.
Por su parte, la actividad comercial presentó una disminución de 8,8%, resultado incidido principalmente por el comercio minorista, destacando las menores ventas en supermercados, establecimientos especializados de vestuario, calzado y equipamiento doméstico y grandes tiendas.
A su vez, el comercio mayorista presentó caídas en la mayoría de sus líneas, siendo las ventas de enseres domésticos y materiales de construcción las de mayor incidencia.
En tanto, las cifras desestacionalizadas mostraron un crecimiento de 0,5% respecto del mes anterior, resultado explicado por el comercio mayorista.
Finalmente, los servicios aumentaron un 0,1%, resultado explicado por el desempeño de los servicios empresariales y personales.
Acorde con cifras ajustadas por estacionalidad, las actividades de servicios presentaron un crecimiento de 0,1% respecto del mes anterior. Este resultado fue incidido por los servicios empresariales, seguido por los personales.
Fuente: Emol economía, enero 03 de 2023
Las cifras de los sectores económicos siguen evidenciando el complejo panorama para la economía chilena.
La desaceleración de la economía chilena mantiene un complejo rumbo, así los reflejan las cifras de los sectores económicos correspondientes a noviembre de 2022.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la producción industrial anoto una caída de 5% en el penúltimo mes del año, frente al mismo periodo de 2021, encadenando con ello seis meses consecutivos de retrocesos.
El Índice de Producción Manufacturera (IPMan) fue el que más influyó en el resultado, al presentar un descenso de 7,8% respecto a igual mes del año anterior e incidir -3,679 puntos porcentuales (pp.) en el IPI. Esto, principalmente a raíz de la baja interanual de 21,2% en elaboración de sustancias y productos químicos.
Le siguió en incidencia el Índice de Producción Minera (IPMin), que se redujo 3,2% en relación con noviembre de 2021, restando 1,370 pp. a la variación del IPI. Esto, como consecuencia de la menor actividad registrada en dos de los tres tipos de minería que lo componen, en especial la minería metálica.
Por el contrario, el Índice de Producción de Electricidad, Gas y Agua (IPEGA) aumentó 0,3% en doce meses y aportó 0,031 pp. a la variación del IPI. Lo anterior, debido a la mayor actividad registrada en electricidad.
El sector comercio también registró un rendimiento negativo en noviembre, pues el Índice de Actividad del Comercio (IAC) cayó 9,3% interanualmente, incidido por la contracción en las tres divisiones que lo componen, acumulando con ello una variación de -3,1% al undécimo mes del año.
Comercio al por menor, excepto el de vehículos automotores y motocicletas fue la que más impactó en la variación interanual del IAC, al anotar una caída de 15,8% e incidir -6,670 puntos porcentuales. En ello influyó, principalmente, la contracción en otras actividades de venta al por menor en comercios no especializados, según el INE.
Comercio en noviembre
En tanto, comercio al por mayor excepto el de vehículos automotores y motocicletas se redujo 5,3% y restó 2,396 puntos porcentuales al resultado del índice. Esto se debió, fundamentalmente, a la baja en venta al por mayor de alimentos, bebidas y tabaco.
Mientras que comercio al por mayor y al por menor y reparación de vehículos automotores y motocicletas anotó una disminución de 2%, incidiendo -0,257 puntos porcentuales en la variación del IAC, como consecuencia del descenso en venta de partes, piezas y accesorios para vehículos automotores.
En tanto, el Índice de Ventas de Supermercados (ISUP) a precios constantes se redujo 17,2% en doce meses. La serie desestacionalizada y corregida de efecto calendario anotó un descenso mensual de 2,5% y una baja interanual de 17,4%.
Fuente: Emol economía, diciembre 30 de 2022
Pronósticos de la banca inversión coincidieron ayer con los números de la Cepal, que asumen un mejor pasar para este año y uno peor el siguiente.
Si bien las últimas cifras de actividad, con un Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) que sorprendió al caer menos de esperado (-1,2%), dieron cuenta de cierta resilencia de parte de la economía, aquello no ha sido suficiente para mejorar las perspectivas para la economía chilena, en especial de cara al próximo año.
Así lo muestran los resultados de la última encuesta del año de Consensus Forecast, la primera luego de que el Banco Central mejorara sus perspectivas para este año, pero empeorara las del 2023.
La Cepal prevé que Chile será el país de peor desempeño en la zona en 2023, junto con Haití.
Los 22 bancos de inversión, consultoras y centros de pensamiento encuestados prevén que el Producto Interno Bruto (PIB) se contraerá durante cuatro trimestres seguidos, partiendo por una caída de 2,5% en el vigente cuarto trimestre, para moderar a una contracción de 2,1% entre enero y marzo de 2023, para luego profundizar a una caída de 2,8% entre abril y junio, y para cerrar la racha con una merma de 0,9% en el tercer cuarto del próximo año.
Así, el Producto volvería a repuntar en 12 meses recién entre octubre y diciembre de 2023, con un leve avance de 0,8%, para luego acelerar a 3,4% y 3,9% en los próximos dos trimestres.
Ahora, pensando en el año en su conjunto, el consenso de los analistas mejoró la perspectiva de PIB para 2022, en dos décimas a 2,4%.
ABIF, Gemines y Oxford Economics lideran con las proyecciones más optimistas del mercado, mientras que en el otro extremo se ubica la Universidad de Chile.
Los pronósticos para el consumo privado también mejoraron, esta vez en cuatro décimas a 3,2%, mientras que en el caso de la inversión la revisión fue de cuatro puntos porcentuales, ahora anticipando un crecimiento de 2% en el ejercicio.
¿Y 2023? Las apuestas se mantuvieron en una caída de la economía de 1,1% el próximo año, más leve que la parte media del rango del Informe de Política Monetaria (IPoM) del Banco Central, que apuntaba a -1,3%.
Banco BICE es el actor que espera la caída más pronunciada de la actividad, mientras que el más optimista es AGPV, con un crecimiento de 1% anticipado (ver tabla).
Eso sí, en términos de composición las proyecciones mejoraron tanto para el consumo como para la inversión, aunque ambas apuntan a descensos anuales.
En cuanto al consumo, se prevé una baja de 2,2%, cinco décimas mejor que en la encuesta previa. ¿Para la inversión? El consenso es de una merma de 3,7%, una décima de mejoría versus el mes previo.
Las perspectivas de inflación también se corrigieron, pero al alza, asimilando el sorpresivo Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 1% en noviembre. El mercado prevé un cierre de 2023 en 12,7% y de cara a 2023 el pronóstico se situó nuevamente en 4,8%.
Ajuste regional
En su informe “Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2022”, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) apunta a un contexto de incertidumbres externas y restricciones internas, a raíz de la guerra en Ucrania y los impactos de la pandemia, que han hecho revisar las estimaciones del Producto Interno Bruto (PIB) de los países.
Si en octubre se esperaba un crecimiento regional de 3,2% para este año y 1,7% el próximo; la nueva estimación es de 3,7% para 2022 y de 1,3% en 2023.
Desde las proyecciones pasadas, el informe también muestra mejoras para el crecimiento de Chile este año, aunque empeora para el próximo.
La revisión señala que la economía chilena se expandirá 2,3% este año y caerá 1,1% el próximo.
Previamente, el organismo pronosticaba una expansión de 2,2% en 2022 y un declive de 0,9% en 2023.
De esta forma, al igual que en sus informes anteriores, la Cepal sigue previendo que Chile será la única economía de la región -en conjunto con lo que ocurrirá en Haití- que sufrirá una contracción en 2023.
Fuente: Diario Financiero, diciembre 16 de 2022
Según el ente rector, la revisión al alza de las proyecciones inflacionarias responde a «la sorpresa acumulada en los últimos meses y un tipo de cambio real que descenderá más lentamente».
El Banco Central publicó esta mañana su último Informe de Política Monetaria (IPoM) del año, en el cual revisó al alza su proyección de crecimiento del PIB en 2022 hasta 2,4%, versus la expansión de entre 1,75% y 2,25% prevista en septiembre.
Eso sí, el instituto emisor anticipa una recesión más profunda en 2023, y que la actividad anote una variación de entre -1,75% y -0,75% (más bajo que el -1,5% y -0,5% previsto en el IPoM anterior), para luego crecer entre 2% y 3% en 2024 -en el informe anterior, el Central proyectaba una expansión de entre 2,25% y 3,25%-.
«La revisión al alza para 2022 responde a datos efectivos, mientras que el grueso de la corrección a la baja para 2023 y 2024 responde al nuevo supuesto para el crecimiento tendencial», indicó la entidad presidida por Rosanna Costa en el documento.
Además, la proyección incluida en este IPoM sigue considerando que el consumo y la inversión tendrán tasas de variación negativas en 2023. «Esto refleja un mercado laboral que ha perdido fuerza, expectativas de hogares y empresas en niveles pesimistas, un tipo de cambio real elevado y condiciones financieras más restrictivas para todo tipo de créditos», señala.
Por el lado fiscal, el ente rector «considera un gasto acorde con el prepuesto aprobado para 2023, que sigue una senda de consolidación para los años siguientes».
Inflación y tasas
Sobre la inflación, el Banco Central subió sus estimaciones para 2022 y todo 2023, proyectando que para la segunda mitad de 2024 volverá a valores cercanos a la meta en torno a 3%.
Así, la autoridad monetaria espera que la escalada de precios termine el año en curso 12,3% (12% en septiembre). En tanto, para 2023, se proyecta que el IPC total promediará 6,6%, alcanzando a diciembre el 3,7% – 6,1% y 3,3%, respectivamente, en IPoM anterior-.
A este respecto, el ente rector sostiene que «esta revisión considera la sorpresa acumulada en los últimos meses y un tipo de cambio real (TCR) que descenderá más lentamente a lo largo del horizonte de proyección».
«Sobre esto último, se supone que el TCR se mantendrá en torno a sus niveles actuales en los próximos trimestres, lo que contribuirá al ajuste de los desequilibrios locales, para luego comenzar a disminuir, en línea con el ajuste de los desequilibrios y la convergencia de otros fundamentos», agrega.
Por otro lado, el Central destaca que «la política monetaria ha hecho un ajuste significativo y está propiciando la resolución de los desequilibrios presentes en la economía. No obstante, la inflación sigue siendo muy elevada y la convergencia a la meta de 3% aún está sujeta a riesgos».
«El Consejo mantendrá la TPM en 11,25% hasta que el estado de la macroeconomía indique que dicho proceso se ha consolidado», subraya, en línea con la decisión de tasas informada este martes.
En este sentido, el IPoM advierte que «un factor relevante es la evaluación de la persistencia inflacionaria, ya sea por la magnitud y signo de nuevas sorpresas en la inflación o por el grado de ajuste de las expectativas. Escenarios donde estas variables denoten una menor (mayor) persistencia inflacionaria podrían llevar a un proceso de reducción de la TPM más adelantado (tardío) que lo previsto».
«Otro factor de relevancia será la velocidad de ajuste de la economía. El escenario externo ha tenido un continuo deterioro y las expectativas de hogares y empresas están en niveles pesimistas. En este contexto, no podría descartarse un ajuste más rápido de la economía que lleve a una reducción más temprana de la TPM», apuntó.
Otras proyecciones
Sumado a lo anterior, se proyecta que la inversión, medida como Formación Bruta de Capital Fijo, caerá 5% en 2023, por encima del 4,7% estimado en el informe anterior.
Junto con ello, se estima que «el déficit de la cuenta corriente descenderá en los próximos trimestres, en un contexto en el que la economía retome el equilibrio entre ahorro e inversión. También colaborará la reducción de los altos costos de transporte».
En el escenario central, la cuenta corriente cerrará 2022 con un déficit de 8,7% del PIB, cifra que descenderá a 4,9 y 4,1% en 2023 y 2024, respectivamente.
En los precios de las materias primas sigue previéndose una trayectoria a la baja respecto de los niveles actuales. Para el cobre, por ejemplo, se anticipan precios promedio de US$3,55 y US$3,45 la libra para los próximos dos años, y para el petróleo se prevén valores en torno a US$80 el barril en el mismo lapso.
Principales proyecciones
2022 (f) | 2023 (f) | 2024 (f) | |
PIB (%) | 2,4 | -1,75 / -0,75 | 2,0 – 3,0 |
Cuenta corriente (% del PIB) | -8,7 | -4,9 | -4,1 |
Inflación total (promedio anual, %) | 11,6 | 6,6 | 3,2 |
Inflación subyacente (promedio anual, %) | 9,3 | 7,5 | 3,8 |
Inflación en torno a dos años (%) * | — | — | 3,0 |
Crecimiento mundial (%) | 3,2 | 1,9 | 2,8 |
Precio del cobre (centavos de dólar / libra) | 400 | 355 | 345 |
* Corresponde a la inflación proyectada para el cuarto trimestre de 2024. | Fuente: Banco Central de Chile
Fuente: Emol economía, diciembre 07 de 2022
Según datos del SII de la Operación Renta 2022, en contraste las grandes firmas son solo el 1,3% del total, pero facturan el 87,1% de las ventas a nivel país
El crecimiento histórico que exhibió la economía chilena en 2021, con una expansión del Producto Interno Bruto (PIB) de alrededor de 12%, tuvo su correlato con algunos indicadores de actividad, como la cantidad de empresas operando en el país o el número de trabajadores que estas informan.
Y aquello se refleja en los datos que declararon los contribuyentes, tanto personas naturales como jurídicas, al Servicio de Impuestos Internos (SII), en el marco de la Operación Renta 2022.
El proceso, cuya información procede del ejercicio comercial 2021, muestra que en el país existen 1.393.949 empresas, lo que implica un crecimiento de 4,9% respecto al año económico 2020.
Mirado en perspectiva, esta es la mayor tasa de variación desde 2018, cuando el número de sociedades se incrementó 7,8%. En 2019 y 2020, años marcados por la crisis social y el inicio de la pandemia, el avance mostró una ralentización, al aumentar solo 3,6% y 1,1% el número de compañías, respectivamente.
Las ventas totales anuales reportadas por las sociedades, en cambio, anotó un avance considerable, el mayor de las últimas décadas.
En específico, los ingresos facturados crecieron un 30% hasta totalizar 31.577 millones de UF (algo así como US$ 1.232.411 millones, casi cuatro veces el PIB total del país). Esta es la mayor variación desde 2011, cuando las ventas se expandieron un 15,6%.
El año pasado, tanto el Producto como el consumo anotaron crecimientos históricos, de la mano del rebote por la caída provocada por las medidas de confinamiento para enfrentar el Covid en 2020, así como las masivas ayudas fiscales y los retiros anticipados de fondos previsionales.
Las citadas compañías, en total informaron que emplearon a 9,8 millones de trabajadores dependientes durante el 2021, nuevamente una expansión récord en las últimas décadas al crecer un 8,3% respecto al 2020. Este dato es comparable solo con el 9,2% registrado durante el 2007.
De este total 3,8 millones son dependientes mujeres, mientras que 5,9 millones son hombres.
Ahora, al analizar los datos por tipo de segmento de empresa, se contradice dicha idea instalada de que las Pymes lideran tanto en ventas como en empleabilidad en el país.
Esto, ya que por una parte las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipyme) representan un 79,2% de las sociedades en Chile, totalizando 1,1 millones de compañías. Eso sí, facturan solo el 12,8% de las ventas en el país y emplean a un 44,1% de los trabajadores dependientes.
En contraste, las grandes compañías totalizan el 1,3% del universo de empresas en Chile, pero tienen un peso de 87,1% en las ventas y de 48,7% en las contrataciones totales.
Según la tipología del SII, los cinco tramos de ventas para calificar a las sociedades tienen los siguientes cortes: sin ventas corresponde a contribuyentes cuya información tributaria declarada no permite determinar un monto estimado de ventas; micro, con ventas anuales entre 0,01 a 2.400 UF; pequeña, desde 2.400,01 UF a 25.000 UF por año; mediana, entre 25.000,01 UF a 100.000 UF; y grande, sobre 100.000,01 UF.
Inscripción de actividades
Otros datos del SII dan cuenta de en qué rubros principalmente se concentraron los contribuyentes con actividades económicas informadas.
El Comercio al por mayor y al por Menor lideró la cantidad de actividades inscritas, con 338.499, un aumento de 16,6% respecto a 2020. Más atrás lo siguió Otras Actividades de Servicios, con 241.332 en total, una variación de 19,9% si se compara con el ejercicio previo. Cierra el podio Actividades Profesionales, Científicas y Técnicas, con 122.548 contribuyentes, un 1,29% de expansión anual.
En el otro extremo se ubicaron las Actividades de Hogares como Empleadores y Actividades no Diferenciadas de los Hogares, con apenas 125 contribuyentes que informaron dicha actividad, lo que de todas maneras significa un crecimiento de 31,6% anual. Algo más arriba se ubican las Actividades de Organizaciones y Órganos Extraterritoriales, con 279 declarantes y una mejoría de 99,3% versus el 2020.
¿Y en regiones?
Como se podía esperar, la Región Metropolitana es el territorio que alberga la mayor cantidad de empresas, con un 43% del total, unas 602 mil sociedades.
Lejos atrás lo sigue la Región de Valparaíso, con un 10% y 135 mil compañías. Lo cierra el podio Biobío y el Maule, ambas con un 7% del total país cada una.
En el otro extremo se emplazan Magallanes, Atacama, Aysén y Arica y Parinacota, en cuyo cada caso tienen un peso de 1% en el total de sociedades inscritas a nivel país, respectivamente.
Medido en ventas, en la Metropolitana se registra un 79% de la facturación a nivel país, con Valparaíso (4%), O´Higgins, Biobío y Los Lagos (cada una con 3%) escoltándola muy de lejos.
Mientras que, a nivel de trabajadores dependientes, un 61% se emplean en la Metropolitana, un 7% en Valparaíso y un 6% en Biobío.
Fuente: Diario Financiero, diciembre 07 de 2022
Las remuneraciones reales en el país descendieron 1,7% en el décimo mes del año, su menor retroceso desde mayo de este año.
Pese a mostrar signos de moderación, los salarios salarios siguen cifras negativas ante la destrucción del poder adquisitivo que ha significado la alta inflación que golpea al país.
Según informó este martes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el Índice de Remuneraciones Real -que descuenta la variación del IPC- registró en octubre una baja de 1,7% respecto al mismo mes de 2021, completando así 13 meses consecutivos de retrocesos.
Sin embargo, se trata de la menor caída desde mayo de este año, cuando el índice también mostró un descenso de 1,7%. De hecho, en los últimos cuatro meses los salarios reales venían cayendo sobre 2%, incluso superando el 2,5% en meses como julio y agosto.
Con el dato del décimo mes del año, el indicador acumuló una caída de 2,4% en lo que va del año.
Por otro lado, los Índices Nominales de Remuneraciones (IR) y del Costo de Mano de Obra (ICMO) registraron alzas en doce meses de 10,9% y 10,5%, respectivamente.
Por sector económico, Comercio, Industria Manufacturera, Construcción y Minería consignaron las mayores incidencias anuales positivas en ambos indicadores.
La remuneración media por hora ordinaria fue $6.047, anotando un alza interanual de 10,4%. Este valor se ubicó en $5.747 para las mujeres, lo que significó una variación anual de 10,8%, mientras que para los hombres se situó en $6.306, registrando un aumento de 10,1% en el mismo período.
Mientras que el costo medio de la mano de obra por hora total fue $6.923, consignando un crecimiento de 10,2% en doce meses. Este valor se ubicó en $6.570 para las mujeres, lo que implicó un incremento interanual de 10,6%, y en $7.230 para los hombres, registrando un alza de 9,8% en el mismo período.
La brecha de género de la remuneración media por hora ordinaria fue -8,9%, mientras que la del costo medio de la mano de obra por hora total fue -9,1%, señaló el INE.
Fuente: Emol economía, diciembre 06 de 2022
La cifra se ubicó en la parte baja de las expectativas de analistas, que apostaban por un descenso de entre 0,9% y 2,5%.
El Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) de octubre registró una caída de 1,2% en comparación con igual mes del año anterior, según informó este jueves el Banco Central.
Tal como lo esperaba el mercado, con este dato se concretó la segunda caída mensual consecutiva y el mayor retroceso desde febrero de 2021, cuando el país aún sentía el impacto de las restricciones por la pandemia. Lo que sí, la cifra se ubicó en la parte baja de las expectativas de analistas, que apostaban por un descenso de entre 0,9% y 2,5%.
Según la entidad presidida por Rosanna Costa, el resultado del Imacec del décimo mes del año se explicó por la caída del comercio y, en menor medida, por la industria manufacturera.
En tanto, la serie desestacionalizada aumentó 0,5% respecto del mes precedente y cayó 0,8% en doce meses. El mes registró un día hábil menos que octubre de 2021.
El crecimiento del Imacec en términos desestacionalizados fue determinado por «el desempeño de la minería».
Por otro lado, el Imacec no minero presentó un una disminución de 1,8% en doce meses, mientras que en términos desestacionalizados, cayó 0,4% respecto del mes anterior.
Análisis por actividad
La producción de bienes creció 0,7%, resultado que fue explicado por el aumento de 1,7% de la minería, el cual fue compensado en parte por la caída de 5,0% de la industria. En tanto, el resto de bienes no registró variación.
En términos desestacionalizados, la producción de bienes presentó un crecimiento de 1,8% respecto del mes anterior.
Esto, mientras que la actividad comercial presentó una disminución de 10,3%, resultado explicado por el comercio minorista y mayorista. Ambas actividades presentaron caídas generalizadas en todos sus componentes.
En minoristas incidieron las menores ventas en grandes tiendas y supermercados y, en mayoristas, las materias primas, alimentos, bebidas y maquinaria y equipo.
En tanto, las cifras desestacionalizadas mostraron un aumento de 0,4% respecto del mes precedente.
Finalmente, los servicios presentaron un crecimiento de 0,9%, resultado explicado por el desempeño de los servicios empresariales, seguido por el transporte.
Acorde con cifras ajustadas por estacionalidad, las actividades de servicios presentaron una caída de 0,6% respecto del mes anterior.
Fuente: Emol economía, diciembre 01 de 2022