La contracción económica en medio a la guerra comercial disminuye las importaciones, pero la región no invierte en el mercado interno.
Alacero – Sao Paulo, Brasil, 03 de septiembre, 2019. América Latina registró su déficit comercial de laminados más bajo en 16 meses, aunque se presenta un déficit acumulado de 2,0 Mt en la producción de laminados en comparación con los siete primeros meses de 2018. La participación de las importaciones en el consumo regional cerró el semestre en 36%, después de tres meses consecutivos en 37%, mismo porcentaje visto entre enero-junio de 2018. El déficit registrado en enero-junio de 2019 fue de 6,94 Mt, con 10 mil toneladas menos que enero-junio del año anterior (6,95 Mt).
Además de la disminución de la participación de las importaciones en el consumo real, el consumo latinoamericano en sí mismo se ha reducido, especialmente de productos laminados. Este factor, combinado con la incertidumbre política y la desaceleración económica, representa uno de los principales elementos que impulsan la baja actividad de la industria del acero en América Latina.
En este escenario, con el peor indicador desde febrero, el consumo de acero en América Latina cayó un 11,75% en junio en comparación con el mismo mes de 2018, un 7% menos que en mayo de 2019 y un 3% en el acumulado en comparación con la primera mitad de 2018. El resultado fue un 4% inferior al promedio de los primeros 5 meses del año, y los países que lideraron la mitad de esta disminución regional en junio fueron, justamente, México y Argentina. Ambos disminuyeron su consumo de acero en un 10% en comparación con mayo, en 5,8% y 14,7%, respectivamente, en comparación con el mismo mes de 2018. La producción regional de acero crudo y de acero laminado hasta junio bajó 5% y 6%, respectivamente, en la misma comparación a los primeros seis meses del año anterior.
Importaciones: índice más bajo desde febrero
Las importaciones latinoamericanas de acero laminado registraron su tasa más baja desde febrero de 2018 (1,694 Mt), llegando a 1,699 Mt en junio. La región cayó un 17,5% sus importaciones entre mayo y junio de 2019, presentando 2% de baja en comparación con enero-junio de 2018. Las mayores caídas se observaron en México (180 mil t) y Brasil (60 mil t), totalizando una caída de 240 mil toneladas en las importaciones de laminados. La participación de las importaciones sobre el consumo totalizó el 36% en el año, frente al 35% fue observado en el segundo trimestre de 2019.
Exportaciones siguen en baja
Las exportaciones de laminados de la región cayeron un 9% de mayo a junio, y registraron una disminución del 6% en el acumulado de 2019. Casi la mitad de esta disminución estuvo representada por Brasil (46%), que exportó 45 mil toneladas menos en comparación con el mes de mayo pasado. Argentina representa la segunda mayor caída (28%), lo que corresponde a 27 mil toneladas.
Balanza comercial indica oportunidad de crecimiento
Las importaciones de productos laminados de América Latina han experimentado una caída casi cuatro veces mayor que la contracción vista en las exportaciones, y la reducción del déficit ha sido la más baja desde febrero de 2018. Brasil y Argentina fueron los únicos al alcanzar un saldo positivo de 1.2 Mt y 124 mil toneladas, respectivamente, mostrando una gran brecha en las inversiones en infraestructura de fabricación para construir su recuperación económica. México, con un saldo negativo de 3.5 Mt, representa el mayor déficit regional (50% del total latinoamericano), que se acompaña de disminuciones en la producción.
“Esta situación muestra que la economía latinoamericana tiene ahí una oportunidad para crecer en el consumo al estimular la producción interna, con el objetivo de abastecer la demanda regional. Junto con las disminuciones en el consumo, las caídas en la producción apuntan a una dependencia de los acuerdos comerciales de Estados Unidos con China y otros como la Unión Europea, y a la vez son signos de desindustrialización y pérdida de competitividad”, dice Francisco Leal, Director General de Alacero.
Peor producción de acero bruto en 31 meses, más perspectiva positiva para laminados
En julio, la producción latinoamericana de acero bruto registró su peor índice desde diciembre de 2016, retrocediendo un 5% no solo respecto al mes anterior sino también en el año. La caída fue impulsada en gran medida por el recorte de 373 mil toneladas en la producción de Brasil, que vio su índice alcanzar un mínimo histórico. En comparación con julio de 2018, la caída en la producción latinoamericana fue del 15%.
La producción de laminados en julio ya era un 0,4% superior al promedio del primer semestre, lo que indica una perspectiva ligeramente positiva para el segundo semestre, pero un 6% más bajo en lo que va del año. En comparación con 2018, México mantiene una participación del 69% del déficit regional, registrando en julio un resultado 2% por debajo del promedio del primer semestre. El país representa el 20% de la caída del 5% en la producción latinoamericana de acero laminado en julio en comparación con el mismo período del año pasado.
Fuente: Alacero, septiembre 03 de 2019
Tanto la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), y la Cámara Nacional de Comercio (CNC), lamentaron el avance de la iniciativa que reduce la jornada laboral.
Luego de una tensa jornada de debate, la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados aprobó el eje central del proyecto que reduce la jornada laboral de 45 a 40 horas, hecho que fue rechazado por los gremios empresariales.
En esa línea, tanto la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), y la Cámara Nacional de Comercio (CNC), lamentaron el avance de la iniciativa e hicieron un llamado a analizar la problemática laboral que afecta al país.
«La aprobación de hoy (ayer) es darle la espalda a la realidad del mundo del trabajo, en favor de lo ideológico. Desde nuestro Foro Trabajadores-Empleadores pedimos ser escuchados, pero en la votación se taparon los oídos con tapones muy herméticos», señaló a través de un comunicado el líder de la CPC, Alfonso Swett.
Asimismo, desde la SNA manifestaron que la aprobación del «corazón» de la iniciativa es «lamentable», pues «tendrá un efecto directo en los salarios de los trabajadores agrícola (…) Solo a modo de ejemplo, las actuales 7,5 horas diarias de la agricultura, pasarían a 6,2 horas, lo que al año serían 260 horas menos, según cifras entregadas por el ministerio del Trabajo».
Con lo anterior, el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, Ricardo Ariztía, hizo un llamado «a que en la discusión que viene en la Sala de la Cámara prime la sensatez. Nos urge que los diputados consideren las consecuencias de poner a los trabajadores agrícolas en una situación de disminución de sus ingresos, ya que la gran mayoría trabaja en el sistema de tratos. A esto se sumaría un costo adicional en movilización y alimentación».
«Además, las Pymes deberán ajustar sus producciones, reemplazar obra de mano, y esto de paso provocaría un aumento de informalidad. Desde la SNA lamentamos que nuestros propios trabajadores se vean envueltos en una aventura laboral», añadió.
En tanto, en esa misma línea, la Cámara Nacional de Comercio instó a los actores políticos a dialogar sobre la forma correcta de abordar la problemática laboral que afecta al país.
«El sector comercio está siendo especialmente afectado, sobre todo por el tema de la tecnología, que se ha transformado en una amenaza para nuestra actividad, el desempleo, la informalidad y la baja en las ventas, por lo que es urgente hacer un análisis sistémico de todo lo que significa la problemática laboral en nuestro país y que la abordemos en plenitud», sostuvo Manuel Melero, presidente de la CNC.
En ese sentido, agregó que no solamente hay que mejorar la calidad de vida de los trabajadores, sino que «también debemos hacernos cargo de los demás alcances y consecuencias del ámbito laboral en nuestro país y abordar el tema de la polifuncionalidad, la informalidad y el desempleo junto con la urgente necesidad de impulsar la capacitación».
Fuente: Emol economía, septiembre 03 de 2019
Medida aumentaría en 16% la productividad.
La cita se llevó a cabo en Teatinos 120.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, recibió a la mesa directiva de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet).
Durante el encuentro, el presidente del gremio, Dante Arrigoni, solicitó al secretario de Estado como medida “adicional y efectiva” de impulso a la inversión, una depreciación instantánea del 100% para la nueva inversión en capital físico específico de la industria 4.0.
“Esta medida podría generar un aumento de la inversión anual en tecnológía de un 3%, un incremento del crecimiento del PIB en 0,1% al año y un aumento de la productividad de un 16% en 10 años”, aseguró el dirigente gremial.
La mesa directiva de Asimet también le solicitó al titular de Hacienda la creación de una mesa de trabajo público- privada que aborde el tema de la reindustrialización del país y del tránsito hacia la economía del futuro de manera “urgente”, dijo Arrigoni.
Fuente: Diario Financiero, septiembre 03 de 2019
Alfredo Moreno aseguró igualmente que el Puente Industrial en Biobío implica un cambio muy importante en logística
En el contexto de su última visita a la región del Biobío, en el sur de Chile, el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno expuso en el Encuentro Regional de Empresas (Erede) el tema ‘Infraestructura: mayor productividad y conectividad para la zona’ y revisó los avances de la construcción del Puente Bicentenario, que pretende conectar San Pedro de la Paz con Concepción, el cual se pretende finalizar el segundo semestre de 2021.
En entrevista con MundoMaritimo, el secretario de Estado se refirió a los desafíos que implica el desarrollo de los planes maestros logísticos, a la alternativa de incorporar el uso de bitrenes en Chile y al impacto que generará la construcción del Puente Industrial para la región del Biobío.
En cuanto al Plan Maestro Logístico, que desarrolla el Ministerio de Obras Públicas (MOP) en conjunto con el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) explicó que la iniciativa “busca que la logística sea más eficiente, que tenga menos costos, ya que eso es lo que hace que los productos desarrollados en Chile sean competitivos en el mundo o que los productos que importamos reduzcan sus costos”.
Moreno indicó que el plan apunta al desarrollo de grandes obras, en materia de puertos, aeropuertos, carreteras y ferrocarriles. “Esto no tiene que ver con sólo cómo se desarrollan los puertos, sino que como se accede a ellos, hay muchos terminales, en que los camiones tienen muchas dificultades para llegar hacia ellos, y para salir y acceder del puerto”, señaló.
Por tanto, indicó, “se requiere de buenas carreteras y que los tráficos no sean a través de las ciudades, sino que sean por los alrededores, de tal forma que no alteren la vida de las personas”, agregó.
“Partimos por la zona norte en Antofagasta (Con el plan Maestro Logístico), ahora viene la zona centro y posteriormente nos enfocaremos en la zona sur, por lo que en los próximos meses contaremos con el mismo trabajo, pero para el resto del país”, aseguró.
Cabe mencionar que esta iniciativa se interconecta con el ‘Plan de Movilidad hacia 2050’ que impulsa el MOP, con el que coincide en la necesidad de darle un mayor protagonismo al ferrocarril de carga. “Hay una necesidad de ferrocarriles de carga desde los puertos hacia los centros de consumo o desde los grandes lugares de producción hacia los puertos”, sostuvo.
Puente Industrial
Para diciembre próximo está contemplado iniciar las obras del Puente Industrial sobre el río Biobío -que unirá Hualpén con San Pedro de la Paz- el cual permitirá dotar de mayores opciones para el transporte de carga en camiones en la región del Biobío.
“Vamos iniciar la construcción a fin de año, luego (el viaducto) va estar conectado con un nueva autopista concesionada, que es Pie de Monte, que va ayudar a descongestionar la ruta 160, es importante para la mover la carga, pero también para mejorar el tráfico de automóviles, dado que en la medida que la carga tiene un mejor lugar para moverse los vehículos particulares tienen menos congestión, así que la idea es que a futuro haya una circunvalación en donde los camiones pueden movilizarse (hacia los puertos) sin tener que atravesar el radio urbano de ninguna de las ciudades”, explicó el titular del MOP.
Cabe mencionar que el nuevo viaducto proyecta una inversión de US$ 182 millones. En tanto que, la Ruta Pie Monte será licitada el segundo semestre de 2022 y contempla una inversión de US$240 millones.
Este proyecto- de acuerdo al secretario de Estado- implicaría un cambio radical para la logística al ofrecer una mayor alternativa de puentes sumándose a los ya existentes: Juan Pablo II (restringido para la carga); Llacolén (con restricción horaria); y puente Bicentenario (aún en construcción).
“Hoy los camiones tienen muchas restricciones, hay pocos puentes sobre el río Biobío, de los que existen uno no puede ocuparse por camiones por las restricciones de peso y otros tienen restricciones horarias, por lo que para los camiones y la logística de la carga tener nuevos y mejores puentes sobre el río Biobío es un cambio muy importante”, aseguró.
Como Ministerio ¿qué desafíos vislumbran para el sector logístico y portuario a nivel nacional?
«La infraestructura logística es la espina dorsal del país, sin eso no es posible crecer, dado que cualquier actividad económica adicional, va ir aparejada de un crecimiento en los volúmenes de carga y también en mayor movimiento de las personas. A su vez se requiere de infraestructura en aeropuertos, autopistas, puertos, trenes, ya que si no cuentas con esos desarrollos te conviertes en un país no competitivo”.
Piloto para bitrenes
Otra medida que está estudiando el MOP tiene relación con la implementación de camiones bitrenes, que implicaría pasar de las 45 actuales toneladas de carga permitidas a 75 toneladas. “Estamos trabajando en eso, de manera de buscar, donde crear corredores que puedan funcionar, porque hay que tener cuidado con los pesos de tal manera de no dañar las carreteras y los puentes. Pero, es un tema que nos interesa para ser más eficaces”, enfatizó el ministro de Obras Públicas.
No obstante, Moreno evitó indicar donde pretenden desarrollar el piloto de esa iniciativa. “Estamos viendo la posibilidad de hacer la prueba en un camino particular, en una faena específica, de manera de ver sus resultados y cuántas es la eficiencia, cuáles son los impactos sobre la carpeta de rodado, sobre los puentes (…) lo haremos muy pronto, tenemos algunos lugares, lo vamos a hacer y ahí veremos si lo podemos replicar en otros lugares”, dijo.
En cuanto al desarrollo aeroportuario, señaló que este proyecto contempla a la carga en menor medida y que su foco principal está puesto en los pasajeros, considerando que los mayores volúmenes del comercio exterior se transfieren por vía marítima.
Fuente: MundoMaritimo, septiembre 02 de 2019
En reunión con el ministro de Hacienda, el presidente del gremio, Dante Arrigoni, explicó que la medida generaría un aumento del crecimiento anual en 0,1%, y de un 16% de la productividad en 10 años.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, recibió a la mesa directiva de ASIMET, que preside Dante Arrigoni, oportunidad en que el gremio le entregó el informe “Estrategia Industria 4.0: Diseñando el Chile Futuro”, trabajo realizado por los economistas Manuel Marfán y Patricio Meller donde proponen una hoja de ruta para transitar en forma sistémica y colaborativa hacia la economía del futuro.
Durante el encuentro, se comentaron las buenas cifras de la manufactura de julio, que registró un alza de 5,7%, y las medidas para aumentar el crecimiento. En esa línea, Arrigoni solicitó al secretario de Estado como medida adicional y efectiva de impulso a la inversión, una depreciación instantánea del 100% para la nueva inversión en capital físico específico de la Industria 4.0. “Esta medida podría generar un aumento de la inversión anual en tecnología de un 3%, un incremento del crecimiento del PIB en 0,1% al año y un aumento de la productividad de un 16% en 10 años”, aseguró el dirigente gremial.
Al término de la reunión, Arrigoni se mostró muy conforme con la recepción del ministro Larraín, quien, según señaló, se comprometió a estudiar la medida y analizar sus costos.
La mesa directiva de Asimet también le solicitó al titular de Hacienda la creación de una mesa de trabajo público privada que aborde el tema de la reindustrialización del país y del tránsito hacia la economía del futuro de manera urgente: “Esta instancia debe contar con la participación de los sectores público y privado, del mundo político y el académico y de toda la sociedad civil para acordar una estrategia de crecimiento a largo plazo, vinculada a la Cuarta Revolución Industrial.
Necesitamos que el diálogo entre el sector público y privado sea lo más fluido posible, para que realmente haya una interacción que nos permita ponernos de acuerdo y avanzar. Aquí el Estado debe jugar un rol clave como facilitador de este diálogo, y fue lo que le pedimos al ministro, que él pudiera encabezar esta mesa de trabajo”, sostuvo Arrigoni.
Al respecto, agregó que el ministro de Hacienda acogió de manera muy positiva esta iniciativa, materia que seguirán analizando en los próximos días con el subsecretario de la cartera para coordinar la factibilidad de concretarla.
ASIMET, septiembre 02 de 2019
Se discutirá en Sala una vez que se aprueben los artículos transitorios del proyecto en la instancia liderada por la diputada Yeomans.
La Comisión de Trabajo de la Cámara Baja revisó esta tarde el proyecto que reduce las horas laborales de 45 a 40 semanales. Se podría decir que la iniciativa elaborada por Camila Vallejo (PC) se anotó una victoria, ya que superó un importante escollo.
El artículo específico que disminuye las horas de trabajo logró ser aprobado por la instancia y pasará a discutirse en Sala de la Cámara de Diputados, una vez que se aprueben los artículos transitorios.
Lo anterior no pudo concluir durante este día, ya que se tuvo que levantar la sesión por haberse cumplido el horario establecido, el que era hasta las 19:30 de esta tarde. Pero, de todas formas, el proyecto seguirá avanzando en su tramitación, cuando mañana se vuelva a discutir en la referida instancia.
La aprobación del artículo que reduce las horas laborales contó con el voto del diputado de la DC Gabriel Silber, luego de que se incluyera la indicación que introduce cinco años de gradualidad para implementar la rebaja de la jornada laboral.
Por otro lado, el debate contó con la participación del ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, quien confirmó que el gobierno irá al Tribunal Constitucional para dar de baja el trámite del proyecto.
Además, la jornada en la instancia se caracterizó por la acalorada discusión entre los parlamentarios de oposición y oficialismo, argumentando en pro y en contra de la iniciativa. Estos últimos se levantaron rápidamente una vez que finalizó la sesión.
La Comisión tuvo varios encuentros polémicos. Los más destacados fueron los constantes reclamos del diputado Patricio Melero (UDI) en contra de la presidenta de la instancia, Gael Yeomans (Convergencia Social), de faltar al reglamento.
Fuente: Diario Financiero, septiembre 02 de 2019
Entidad es una de las primeras en aplicar un sesgo positivo al crecimiento para este año y el próximo, a medida que avancen las reformas y el plan de estímulo fiscal.
Cierto optimismo se escucha de parte de Gonzalo Sanhueza. El socio de Econsult considera que el mes de julio será el inicio de un proceso de recuperación de la actividad. Sus proyecciones para este año (2,7%) y el próximo (3,2%) están sobre el consenso de los economistas e, incluso, adelanta que sus estimaciones tienen “un sesgo al alza”.
¿La razón? El shock negativo para la economía internacional “ya ocurrió” y el país está “preparado” para enfrentar un empeoramiento del escenario. A esto se le agrega, dice, el impacto positivo que tendrán tanto la política fiscal como monetaria más expansivas.
– ¿En qué se sustenta su visión más optimista?
– El escenario que teníamos para fines de 2018 era que el crecimiento mundial iba a ser bueno y que los riesgos iban a bajar. Pero tuvimos un shock negativo desde la economía mundial por la guerra comercial y que ha producido una recesión del sector exportador.
Ese shock negativo se trasladó hacia la economía chilena y se desaceleró la actividad. Ahora, la economía chilena está empezando a usar sus mecanismos de estabilización. La primera línea de defensa, cuando hay un shock externo, es la política monetaria y el Banco Central redujo la tasa en 50 puntos base y la va a bajar otros 50 puntos mañana, porque el escenario es más negativo de lo que tenía el banco en su último IPoM.
El Fisco ha adecuado su política fiscal, con reasignaciones hacia un gasto que tiene un mayor impacto económico en el corto plazo, por lo que esperamos que en el segundo semestre y el próximo año tengamos un mejor escenario. Julio va a marcar un punto de inflexión, hay varios indicadores que ya muestran que viene mejor: mejoró la confianza de consumidores y empresarios, uno ve los indicadores y se da cuenta de que estamos en un escenario distinto al del primer semestre.
– ¿Cuán duradera puede ser esa recuperación en medio del complejo escenario externo?
– Lo que importa es lo que está pasando con la economía en la punta con los indicadores anticipados. Al menos la confianza dejó de caer. También comienzan a recuperarse las importaciones de bienes de capital. Más allá de que vamos a tener volatilidad en el crecimiento, como tendencia se ve una recuperación.
Obviamente, el escenario es difícil, pero creemos que están las condiciones y el país, al revés de otros, tiene capacidad.
– ¿El año no está jugado?
– No, lo que importa no es 2020, sino cómo vamos a entrar al 2020. Lo que importa es cómo va a estar creciendo la economía chilena en el margen los últimos cuatro meses del año, y ahí sí hay espacio para la política fiscal y monetaria que ya se está implementando.
Luego, hay un elemento que viene más bien del mundo político: siempre hay una discusión política en el país y proyectos en el Congreso que generan incertidumbre. Haber tenido dormida la reforma tributaria por un año generó incertidumbre. En la medida que los tiempos de discusión sean más acotados y la discusión más constructiva, eso es muy importante para las expectativas.
– Pero al gobierno le ha costado sacar las reformas.
– Creo que han hecho un fine tuning bien acucioso, respetando la regla fiscal. Uno ve que el paquete de reasignaciones busca generar más impacto.
En términos legislativos, para la economía es bastante razonable lo que se está logrando. La reforma tributaria tiene efectos muy importantes en simplificación, la depreciación acelerada también tendrá un impacto relevante. El gobierno ha tenido que ceder en algunas cosas, pero lo importante es que no se ha desdibujado el proyecto y mantiene las cosas que ayudarán al crecimiento.
– Hay economistas que ven un impacto acotado de la reforma tributaria en el PIB.
– No hay balas de plata en la economía. No existe eso como cuando uno hace pan, le pone levadura y el pan se infla. ¿La reforma tributaria va a solucionar los problemas de crecimiento de largo plazo de la economía chilena? No. Pero va a contribuir a ello en el largo plazo con un shock enorme sobre las expectativas, en especial porque dará cuenta de que este país todavía puede ponerse de acuerdo en proyectos importantes.
– Raya para la suma, ¿su visión es positiva de cara al fin del año y 2020? No muchos departamentos de estudio tienen esa postura.
– Efectivamente, tratamos de separar un poco la paja del trigo y mirar las variables más fundamentales. Tenemos baja inflación, el déficit fiscal es bajo, la deuda pública ha subido pero a nivel internacional es muy baja, las instituciones funcionan. Entonces, los elementos están. Hay un shock externo negativo, pero hemos construido capacidad de reacción. Hay un gobierno activo para evitar que se genere una subejecución del gasto público. Y a pesar de todo, el Congreso es capaz de ponerse de acuerdo.
Sin incluir el paquete fiscal, estimamos un crecimiento de 2,7% para este año y 3,2% para el próximo año. El paquete fiscal va a tener más efecto el próximo año y eso nos va a llevar cerca de 3,5% de crecimiento. Para este año, si se aprobara la reforma tributaria uno podría tener un crecimiento más cerca del 3%.
– O sea, ¿tienen sesgo al alza para el próximo año?
– Sí, efectivamente los sesgos son más positivos tanto para este año como para el próximo.
«Se puede bajar 50 puntos la tasa ahora y otros 50 puntos el primer semestre de 2020»
– ¿Cuántos recortes de tasa ve después del ajuste de mañana?
– Siempre que hay un shock negativo sobre la economía, la primera fuerza de reacción es la tasa de interés. Entonces, si el shock es más negativo, menos tasa. ¿Hay más espacio? Sí, pero dependerá de si se da el escenario internacional más negativo. Afuera los sesgos están un poco a la baja y es probable que la recuperación sea más lenta de lo esperado. Si eso ocurre, el Banco Central puede seguir bajando tasas. Tenemos más capacidad de reacción que otros países, perfectamente podemos bajar 50 puntos de tasa ahora y el primer semestre del próximo año bajar otros 50 puntos si el escenario central de recuperación no se da.
– ¿Cómo ha visto el desempeño del Banco Central?
– El Banco Central nos sorprendió a fines del año pasado cuando habló de que las brechas de capacidad se habían cerrado y que, por lo tanto, habían presiones inflacionarias y la tasa de interés tenía que subir. Eso nos sorprendió, porque cuando uno está más cerca del sector privado, uno no veía que las empresas tuvieran la sensación de estar operando a plena capacidad y que les costara encontrar trabajadores.
Al banco le ha tocado un período difícil, no es ser fácil ser banquero central en estos momentos y me parece que ha actuado de la forma correcta. Este Banco Central es bastante más conversador y transparente y así son los bancos centrales modernos. Tiene una generación de consejeros jóvenes que se formó en esta escuela nueva de bancos centrales más transparentes.
En ese sentido, creo que el aporte de Alberto Naudon y Pablo García es muy importante y se complementan bien con Mario Marcel, Joaquín Vial y Rosanna Costa, que tienen más experiencia en otros organismos.
Fuente: Diario Financiero, septiembre 02 de 2019
La percepción negativa y muy negativa del ámbito político subió desde 28% en diciembre pasado a 56% en la última medición.
Un aumento de la tendencia a la baja en las expectativas empresariales en materia de ganancias, ingresos operacionales, inversiones y decisiones de contratación de personal, arrojó la última medición elaborada por EY y Diario Financiero en relación a su versión anterior realizada a fines de 2018.
En efecto, si bien la mayor parte de las compañías sigue estimando para este ejercicio crecimientos para sus utilidades y ventas –45,1% y 52%, respectivamente– estos pronósticos son bastante menores a los registrados en diciembre pasado, cuando ambos factores se ubicaron en 66,5% y 73%. La cifra considera un rango que va desde quienes apuestan a incrementos de menos de 5% a alzas superiores a 20%. Y si bien la cantidad de participantes que pronostica un retroceso en las ganancias se incrementó de 9,7% a 27,6% en la misma comparación, el estudio concluye que este ítem aún no alcanza el nivel de 40,6% que anotó a fines de 2017.
Aplicada entre el 12 julio y el 7 agosto pasados a más de 340 altos ejecutivos -directores, gerentes generales y gerentes de finanzas- el sondeo evidenció que el 37,7% espera que su empresa incremente sus inversiones en 2019, superando así a quienes tienen prevista una baja (19,9%), pero situándose por debajo de 41,7% que apostaban a un alza en el registro anterior.
Por el contrario, quienes prevén una reducción en estos presupuestos subieron de 10,5% a casi 20%, pero aún no lejos del 40% de hace dos años. En tanto los niveles de recursos se concentran en el rango de montos inferiores a US$ 50 millones.
“No podemos obviar que el porcentaje mayoritario de optimismo ha caído durante la muestra, pero las bajas aún no se vuelven preocupantes y veo con esperanza que un 45% espera que las utilidades de su empresa subirán y un 27% que se mantendrán y nos da señales de que existe tierra fértil para lograr un impulso en el país. Pero, si será motivo de alarma si la tendencia no se logra quebrar y se dan señales equivocadas en la discusión de la agenda legislativa”, señaló la socia principal de EY, Macarena Navarrete, quien precisó que la medición se efectuó antes del tercer paquete de medidas de reactivación impulsada por el gobierno.
Contratación y remuneraciones
A agosto pasado, un 47,5% de los ejecutivos planeaba conservar sus dotaciones de personal manteniendo así los niveles del año anterior, pero el porcentaje que esperaba subirlas disminuyó de 31,9% a 22%, mientras el segmento de quienes prevén una reducción subió de 17,8% a 30,5%.
Una trayectoria más estable mostró el indicador de remuneraciones, respecto del cual una gran mayoría (71,8%) espera mantener los niveles actuales en su empresa, en tanto sólo un 4,1% considera una disminución y un 24% estima que los salarios aumentarán este año.
Política crece en impacto negativo
En el análisis del efecto del escenario general del país, la encuesta constató un mayor impacto negativo de estos factores en las expectativas empresariales. Esto es especialmente evidente en el caso del ámbito político, cuya percepción negativa y muy negativa subió desde 28,1% en diciembre pasado a 56% en el último sondeo, en el cual la visión positiva se desplomó a sólo un 9,1%.
“Aunque aún está por verse si el paquete de incentivos logrará compensar el débil crecimiento y las amenazas económicas globales, las reacciones no han sido necesariamente las que el gobierno hubiera querido. Lo anterior no es extraño, dado que el ambiente político se encuentra bastante enrarecido”, indicó.
Una evolución similar tuvo lugar en el ámbito económico: mientras a fines de 2018 más de la mitad de los participantes aún consideraba que el escenario era positivo, en esta nueva versión ese grupo cayó 35,2 puntos porcentuales a 16,4%, en tanto la percepción negativa escaló de 15,7% a 44,9%, en la misma comparación. En el campo de los proyectos de ley con efecto en la actividad empresarial actualmente en trámite, la percepción de la reforma tributaria se mantiene levemente más positiva que negativa (35,2% vs 37%), al contrario de los casos de la reforma laboral –donde la visión más bien negativa (44,8%) supera a la positiva (27,8%)– y de la de pensiones (35,7% vs. 22%).
El análisis concluyó que lo anterior está en línea con las menores expectativas para el crecimiento del país, que la mayor parte de las respuestas sitúa por debajo del 3%.
Irrupción ambiental
En la investigación de los nuevos factores que impactan la marcha de las empresas, un grupo significativo de los consultados destacó a los temas medioambientales, en un espectro que va desde valoraciones positivas –como es la mayor conciencia en relación al cuidado del planeta-, como negativas y muy negativas que formuló un 35,5% de los ejecutivos y que están centradas en el riesgo de mayores trabas regulatorias.
Uno de los aspectos destacados dice relación con la próxima cumbre de la COP25 que se realizará este año en Chile y respecto de la cual un 32,6% manifestó tener incertidumbre frente a sus conclusiones. “El desafío es doble en el sentido que las empresas deben prepararse para ser competitivas y sobrevivir a un Chile bajo cambio climático, a la vez que deben tomar medidas para ser más amigables con el medio ambiente”, indicó Macarena Navarrete.
Otro asunto que irrumpió con fuerza en la agenda empresarial es la transformación digital, la cual si bien es valorada positivamente por un 63%, al mismo tiempo en el 46,9% de las empresas ha generado algún grado de tensión entre las planas ejecutivas y los trabajadores. “Siempre las etapas de transformación generan ansiedades, como es este ámbito que se mueve a pasos agigantados, pero lo bueno es que tenemos claras señales que permiten entender cómo enfocar el talento humano como, por ejemplo, introducir una mayor flexibilidad en el trabajo”, indicó la socia principal de EY.
Fuente: Diario Financiero, septiembre 02 de 2019
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas, «en doce meses, la estimación total de ocupados creció 1,5%, incidida solamente por las mujeres que se expandieron 3,8%».
La tasa de desempleo del país se ubicó en 7,2% durante el trimestre móvil mayo-julio de 2019, según el informe entregado este viernes por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Así, de acuerdo a la información recogida por la Encuesta Nacional de Empleo (ENE), el dato de desocupación nacional se redujo 0,1 puntos porcentuales (pp.) respecto a igual periodo del año anterior.
Por su parte, en comparación con el trimestre móvil previo, la tasa de desocupación desestacionalizada fue 6,9%, creciendo 0,1 pp. con respecto al trimestre móvil de abril-junio.
De todas formas, cabe destacar que pese a la caída respecto al año anterior, la tasa nacional de desempleo del trimestre analizado es la más alta desde el período junio-agosto de 2018, cuando el dato tocó el 7,3%.
Respecto al dato publicado hoy, «este resultado se debió a la expansión de 1,3% de la fuerza de trabajo, menor a la de 1,5% que registraron los ocupados«, explicó el organismo estadístico encabezado por Guillermo Pattillo.
En el aumento de los ocupados incidieron, principalmente, los sectores comercio (4,7%), administración pública (14,3%) y actividades de salud (8,8%), mientras que por categoría ocupacional destacaron los incrementos de los asalariados formales (1,8%), seguido de los trabajadores por cuenta propia (2,3%).
Según categoría ocupacional destacó el alza de los asalariados formales (1,8%), correspondiente a 87.263 personas.
Cabe destacar que la tasa de ocupación informal alcanzó 28,5%, sin registrar variación anual. Al mismo tiempo, los ocupados informales crecieron 1,5% incididos, mayoritariamente, por las mujeres (2,9%) y los trabajadores por cuenta propia (2,8%).
Tasa de desocupación por sexo
En las mujeres la tasa de desocupación alcanzó 7,6%, decreciendo 0,5 pp. en doce meses, debido a que el incremento de 3,3% de la fuerza de trabajo, fue menor al 3,8% registrado por las ocupadas. Así, las desocupadas se contrajeron 2,7%, incididas únicamente por las cesantes (-7,4%).
Por su parte, la tasa de desocupación de los hombres fue 6,8%, sin registrar variación en un año, como consecuencia de la reducción en igual medida de la fuerza de trabajo y de los ocupados (-0,1%, en ambos casos)1, al tiempo que los desocupados crecieron 1,0%, incididos principalmente por quienes buscan trabajo por primera vez.
Fuente: Emol economía, agosto 30 de 2019
Este indicador fue impulsado por la producción manufacturera, que registró su mayor alza mensual en desde junio de 2018.
El Índice de Producción Industrial (IPI) de julio creció 2,6% en doce meses por los aumentos de los sectores manufactura y minería, según informó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
De esta manera, este indicador registró la mayor alza mensual desde junio del año pasado, cuando se expandió 5,3%.
De acuerdo al informe. el Índice de Producción Manufacturera (IPMan) creció 5,7% interanualmente, incidiendo 2,505 puntos porcentuales (pp.) en la variación del IPI. Se trata de la mayor alza mensual desde junio 2018.
El organismo explicó que este resultado se dio, «en gran medida, por el incremento interanual de 8,9% en la elaboración de productos alimenticios, que influyó 2,907 pp. en la variación del IPMan».
En tanto, el Índice de Producción Minera (IPMin) presentó un incremento de 0,5% respecto a igual mes del año anterior, incidiendo 0,219 pp. en la variación del IPI, como consecuencia del aumento de 24,8% en minería no metálica. Por el contrario, minería metálica se contrajo 0,4%, restando 0,370 pp. a la variación del IPMin.
Mientras que el Índice de Producción de Electricidad, Gas y Agua (Ipega) se contrajo 0,8% en relación con julio de 2018, restando 0,090 pp. al resultado, debido a la disminución de 10,0% en gas.
Fuente: Emol economía, agosto 30 de 2019