Documento establece cierta flexibilidad para modificar las dotaciones de trabajadores de dichos rubros.
A días de que entrara en vigencia la Ley de Protección al Empleo, que establece beneficios como la suspensión de la relación laboral para las compañías que no puedan operar debido a resolución sanitaria y el pago de los sueldos de los trabajadores desde sus cuentas individuales del Seguro de Cesantía, el Ministerio de Hacienda publicó esta mañana la actualización del listado de sectores económicos con prohibición de paralizar en medio del estado de catástrofe y las cuarentenas a lo largo del país.
La resolución, publicada hoy en el Diario Oficial, fija los rubros esenciales para el funcionamiento del país. Al no poder cesar sus actividades, dichos sectores no podrán ser clausurados por razones sanitarias y, por tanto, no podrían acogerse a los beneficios de la Ley de Protección al Empleo.
Eso sí, la resolución establece que las empresas de dichos sectores podrán realizar ajustes a su dotación.
«Las actividades o establecimientos exceptuados de la paralización podrán considerar un funcionamiento necesario o indispensable, resguardando siempre la seguridad y salud de sus trabajadores, así como la adecuada provisión de los bienes y servicios a la ciudadanía», señala el documento firmado por los subsecretarios de Hacienda, Francisco Moreno, y del Trabajo, Fernando Arab.
El documento también establece cierta flexibilidad para las industrias que se encuentren paralizadas ante la emergencia sanitaria.
«Aquellas actividades o establecimientos que se encuentren impedidas o prohibidas de funcionar a consecuencia del acto o declaración de autoridad competente, solo podrán considerar un funcionamiento necesario o indispensable a fin de resguardar tanto la seguridad de las instalaciones como su adecuada mantención. Para ello, deberán destinar el personal necesario para cumplir con dicho objetivo, resguardando siempre la seguridad y salud de sus trabajadores», señala.
El detalle de las actividades con prohibición de paralizar:
1.- Salud
- Instituciones de la salud, incorporando a empresas que ofrecen servicios de alimento, limpieza, reparación y mantenimiento esencial para el funcionamiento de estos recintos.
Extiéndase a hoteles de cuarentena, estadios y centros de convenciones u otros destinados a
atención de pacientes, y establecimientos de larga estadía de adultos mayores.
- Farmacias, laboratorios, empresas químicas y productores de medicamentos. Asimismo,
empresas destinadas a la producción de insumos médicos, dispositivos médicos, elementos de
protección personal y de insumos para su almacenamiento y conservación. - Servicios veterinarios y servicios para el cuidado animal en bioterios, zoológicos,
hipódromos, estaciones experimentales, campus universitarios y otras instituciones que posean o alojen animales. Se entenderán incluidas las organizaciones sin fines de lucro que realicen labores destinadas al cuidado animal, debidamente calificados por la autoridad competente.
2.- Emergencias
Servicios de emergencias para la prevención y combate de incendios, y la respuesta a emergencias de empresas de transporte, distribución de gas, empresas de transmisión y distribución de electricidad, telecomunicaciones, agua potable, saneamiento y control de plagas. Asimismo, Bomberos.
3.- Servicios de utilidad pública
- Puertos y aeropuertos del país.
- Suministro de energía y de las centrales de operaciones (generación, transmisión,
almacenamiento y distribución). - Suministro de agua potable, centrales de operaciones, tratamiento de aguas servidas y
riles. Asimismo, servicios para la elaboración de los insumos que son utilizados para la producción de agua potable. - Suministro de gas y centrales de operaciones.
- Estaciones de servicio y distribuidoras de combustible.
- Labores esenciales para el funcionamiento de las autopistas.
- Servicios de telecomunicaciones, data center y centrales de operaciones.
- Reactores nucleares.
- Bancos e instituciones financieras, cajas de compensación, transporte de valores, empresas de seguros generales para efectos del pago de siniestros que deban realizarse de manera presencial, empresas de seguros que pagan rentas vitalicias y otras empresas de infraestructura financiera crítica. Asimismo, los servicios para la administración de fondos de cesantía.
- Instituciones de Salud Previsional (Isapres), Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y del Sistema de Consultas y Ofertas de Montos de Pensión.
- Servicios funerarios y cementerios.
- Empresas recolectoras de basura, de transporte de residuos, fosas sépticas, rellenos
sanitarios, limpieza y lavado de áreas públicas y empresas e instituciones que transporten y procesen materiales reciclables, embalajes y envases. - Servicios en empresas de correos y de delivery, incluidos los servicios de cadena
logística y de reparto de correspondencia y encomiendas. - Servicios en residencias destinadas a niños, niñas y adolescentes, adultos mayores, y de
personas con discapacidad o en situación de calle. Asimismo, los Centros de la Mujer y Casas de Acogida. - Notarías, de acuerdo al turno que establezca la respectiva Corte de Apelaciones para este
efecto, y de los Conservadores de Bienes Raíces. - Servicios esenciales para la facilitación del comercio exterior del país, tales como Agencias de Aduana.
- Servicios para el mantenimiento, reparación y funcionamiento de la infraestructura pública, tales como edificios públicos, aeropuertos, puertos, carreteras, hospitales, ríos, canales, embalses y cárceles.
- Servicios destinados a la producción, elaboración y entrega de alimentos a instituciones públicas y a aquellas que prestan servicios para las mismas.
4.- Alimentos y Comercio Esencial
- Supermercados, panaderías, mercados, centros de abastecimiento, distribución,
producción de alimentos y los que provean los insumos y servicios logísticos para ellos.
Asimismo, entidades que se dediquen a la producción, distribución, comercio y delivery de
alimentos o de bienes esenciales para el hogar y las dedicadas a la producción de insumos para su almacenamiento y conservación. Además, las ferias libres respecto de los feriantes solo cuando presenten su patente y su respectiva cédula de identidad.
- Almacenes de barrio, locales de expendio de alimentos, ferreterías y otros insumos
básicos, sólo cuando sean atendidos por sus propios dueños. - Empresas de agroalimentos y productores silvoagropecuarios, respecto de los predios y
faenas en los que se estén realizando procesos críticos (siembra, cosecha, procesamiento y distribución), así como labores de pesca y procesamiento de pescados y mariscos, producción de alimentos para animales, aves y piscicultura y producción de celulosa y productos de papel,
cartón, derivados envases y embalajes.
5.- Transportes
- Transporte y sus respectivos terminales.
- Transporte de bienes, transporte de carga y descarga de bienes de las empresas respecto
de los rubros señalados en este resuelvo.
6.- Seguridad
- Conserjerías y servicios de seguridad ya sean de edificios, condominios y otro tipo de
propiedades. - Empresas de seguridad, recursos tecnológicos y relacionadas.
7.- Prensa
Medios de comunicación (canales de TV, prensa escrita, radio y medios de comunicación
online).
8.- Educación
- Jardines infantiles y establecimientos educacionales respecto de los asistentes de la
educación y docentes que estén cumpliendo turnos éticos. - Servicios para el soporte y mantenimiento tecnológico de las instituciones educacionales,
sean éstas públicas o privadas.
9.- Otros
- Hoteles en la medida que mantengan huéspedes o cuenten con reservas confirmadas de
pasajeros. - Actividades que por su naturaleza no pueden detenerse y cuya interrupción genera una
alteración para el funcionamiento del país, debidamente determinado por la autoridad
competente. - Empresas y servicios externos o de abastecimientos que sean indispensables para el
funcionamiento de las actividades que no puedan paralizar. - Servicios de mantenimiento, aseo, reparación y funcionamiento de las actividades que no
puedan paralizar. - Establecimientos penitenciarios.
Fuente: Diario Financiero online, abril 08 de 2020
El presidente de la República, Sebastián Piñera, detalló hace minutos la iniciativa.
Así, el mandatario detalló que las propuestas son complementarias a lo anunciado el 19 de marzo y que, en ese momento, involucraban recursos por US$ 11.750 millones.
Piñera señaló que la prioridad del paquete es proteger a las familias vulnerables y ayudar a las PYME a través de mayor liquidez:
Fondo de US$ 2.000 millones: instrumento se crea para entregar mayores beneficios y crear más empleos para las personas y familias más vulnerables. Esto beneficiará especialmente a 2,6 millones de trabajadores informales sin contrato de trabajo y que hoy no tienen la protección del seguro de desempleo. El fondo se financiará con reasignaciones de gasto público.
Un documento oficial del Ejecutivo señala que este mecanismo beneficiará a cerca de 3 millones de personas, su uso será «flexible», a medida que la «situación lo requiera y dependiendo del contexto, otorgando así flexibilidad al Fisco para responder a las necesidades de acuerdo a la evolución de la crisis sanitaria».
Adicionalmente, el jefe de Estado reveló que están trabajando en un sistema «permanente» que permita proteger a los trabajadores independientes que emiten boletas de honorarios. Eso sí, no dio detalles.
US$ 24.000 millones en garantías de crédito: Esta nueva línea de crédito con garantía del Estado permitirá acotar el riesgo de crédito extraordinario generado por el estado de emergencia y facilitará las condiciones para que los bancos presten capital de trabajo a las empresas por un plazo de hasta 48 meses, con un periodo de gracia de hasta 6 meses y por un monto equivalente de hasta 3 meses de venta.
Esta línea estará disponible hasta el 30 de septiembre de este año y permitirá financiar créditos a las empresas por hasta US$ 24 mil millones, lo que equivale a alrededor de 20 veces las líneas actualmente disponibles, dijo Piñera.
¿Cómo se materializará? A partir de modificaciones al Fondo de Garantías para Pequeños Empresarios (Fogape), al que se le inyectarán US$ 3.000 millones para aumentar su capacidad crediticia.
Asimismo, se aumentará el tope de ventas anuales para acceder a dicho instrumentos, desde UF 350 mil por año a 1 millón de UF.
Las condiciones para los bancos que usen las garantías: Los bancos comprometidos a participar en este programa deberán otorgar estas líneas de crédito Covid-19 para capital de trabajo fresco en forma simple, masiva, expedita y a tasas preferenciales a los clientes que lo soliciten y que cumplan con los requisitos definidos.
Por otra parte, los bancos que presten estos recursos a las empresas beneficiadas, con garantías del Estado, deberán reprogramar todos los créditos prexistentes del deudor beneficiado y postergar toda amortización de sus créditos antiguos hasta que los nuevos préstamos estén íntegramente pagados. Estas medidas permiten dar un alivio a las empresas necesitadas y proteger las garantías otorgadas por el Estado.
¿Quiénes se pueden acoger a estas garantías? La garantía que otorgará el Estado dependerá del tamaño de la empresa beneficiada. Para empresas con ventas inferiores a 25 mil UF anuales, la garantía del Estado podrá llegar hasta el 85% del nuevo préstamo para capital de trabajo. Esta garantía será de hasta 70% para empresas con ventas entre mil 25 UF y 100 mil UF anuales, y de hasta 60% para empresas con ventas superiores a 100 mil e inferiores a 1 millón de UF anuales.
¿Para qué pueden usar los créditos las empresas? Las empresas beneficiadas deberán utilizar estos recursos para sus necesidades operativas y de capital de trabajo, incluyendo entre otros, pago de remuneraciones, arriendos, proveedores, obligaciones tributarias y otras necesidades para mantener operativas sus empresas durante la emergencia y retomar la normalidad de sus operaciones una vez superada la crisis.
Las empresas beneficiadas no podrán usar estos fondos para amortizar créditos previos con los bancos, pagar dividendos o hacer retiros de capital, hacer préstamos a terceros relacionados ni otros destinos no indispensables.
¿Cuánto cuesta el nuevo plan? Según Hacienda, se inyectarán US$ 3.000 millones al Fogape y US$ 2.000 millones al fondo para trabajadores informales, por lo que el costo total para el Fisco será de US$ 5.000 millones. Dichos recursos se liberarán a través de reasignaciones de gasto público.
Fuente: Diario Financiero online, abril 08 de 2020
La industria modifica sus ambientes de trabajo con foco en la operación segura y cuidado con la gente
Se estima que las cifras de la industria del acero continúen empeorando en medio del nuevo entorno de la crisis sanitaria y sus efectos económicos. Los resultados de febrero de la producción de acero crudo muestran una reducción del 6% en comparación con el mismo mes de 2019, 4,8 millones de toneladas (Mt). Con 3,4 Mt, la producción de acero laminado fue un 2% más baja que el resultado observado en febrero del año pasado. Los tres países que son principales productores reflejan bajas en el acumulado (enero-febrero): México (-15%), Argentina (-7%) y Brasil (-6%). En el comparativo con Febrero del año pasado, registraron caídas México (-17%) y Brasil (-1%), Argentina tuvo un aumento de 8%.
Las importaciones de acero en enero avanzaron 0.1% en relación con el mismo mes de 2019. Las exportaciones mostraron un recorte del 20% en relación con enero del año pasado, aunque fueron un 9% superiores al resultado de diciembre de 2019 (728 mil t). Este desempeño indica la continuación de los efectos derivados de la baja actividad económica presente desde finales del 2019, que ha desestimulado la demanda del acero, un material imprescindible para muchas otras industrias.
Analistas e instituciones internacionales coinciden en que 2020 será un año difícil al unirse el efecto de la disminución de la actividad económica por el confinamiento general debido al coronavirus y la caída del precio del petróleo. Dada la alta dependencia de América Latina del petróleo, los commodities y del desempeño económico global, la región podrá enfrentar un escenario complejo. Con el objetivo de adaptar la producción a la demanda del mercado, el sector se ha reaccionado disminuyendo la actividad con altos hornos operando a menor capacidad
Salud y seguridad
En la América Latina la industria siderúrgica ha adoptado todas las medidas para una operación segura y el cuidado de la gente. También fueran tomadas acciones de ayuda social como donaciones, construcción de hospitales de campaña, entre otras.
“En medio del avance de esta pandemia en América Latina, nuestra industria está colaborando activamente en el proceso de fortalecimiento de todo el sistema sanitario: desde la construcción de un nuevo centro de tratamiento COVID-19, la ampliación de un hospital, la construcción de un hospital comunitario, destinando fondos extraordinarios para estar cerca de sus comunidades y fortalecer sus sistemas sanitarios», dijo Francisco Leal, Director General de Alacero.
“El acero participa en una enorme cantidad de cadenas de valor que son indispensables, como el transporte, el abastecimiento de oxígeno, la seguridad nacional de los países, la infraestructura, almacenamiento de alimentos y productos desinfectantes, línea blanca y otras tantas que hoy son esenciales ante esta crisis como para la recuperación posterior de la economía.”, completó Leal.
Fuente: Alacero – San Pablo, Brasil, abril 08 de 2020
¿Qué ocurrirá en el mundo después de la crisis global más importante en 70 años? Nadie tiene una respuesta hoy, porque recién estamos viviendo los efectos sanitarios, económicos y sociales de la pandemia Covid-19. Pero sí es posible anticipar que se acelerarán ciertos fenómenos geopolíticos.
El coronavirus le asestará un nuevo golpe a la globalización. Aunque sea imposible ponerle una lápida, el Covid-19 se encargará de mostrar todas sus fragilidades y hará surgir nuevos ánimos proteccionistas. Así como la crisis sub-prime de 2008-2009 hizo crecer el sentimiento antiglobalización y supuso una oleada de proteccionismo comercial, financiero y regulatorio, el coronavirus reforzará ánimos nacionalistas especialmente en aquellos países que se han sentido más vulnerables a la crisis.
El comercio mundial, basado en la deslocalización de la producción y amplias cadenas de suministro dependientes de China, también acusará el golpe. Las voces que proponen regresar las fábricas a sus países de origen, uno de los símbolos del “America First” de Trump, tomarán mayor fuerza. Las imposiciones en Estados Unidos a General Motors o 3M no son sino un anticipo de una tendencia creciente: el uso de leyes o prerrogativas nacionales sin mayor consideración a obligaciones asumidas en tratados internacionales.
El alicaído multilateralismo debiera quedar más debilitado aún. Organizaciones como la ONU o la propia Organización Mundial de Salud no han mostrado el protagonismo del pasado. La Organización Mundial de Comercio, por su parte, será más ignorada en conflictos comerciales, como ocurrió en la guerra comercial. Si el G-20 fue la respuesta a la crisis financiera 08-09, hoy es difícil vislumbrar una iniciativa supranacional post-pandemia. El tradicional director de orquesta, EEUU, ha renunciado a ser el líder global que orientaba los esfuerzos en el pasado.
Sin embargo, la propia globalización es el único camino de solución. Sin ella no hay intercambio de conocimiento y provisión de bienes y servicios, cooperación de personal especializado, difusión de nueva tecnología, e incluso ayuda económica a países pobres. La actitud “trumpista” de prohibir exportaciones, o los populismos locales que proponen volver a la la sustitución de importaciones, no son más que salidas al paso u oportunismos políticos. La solución debe ser global y planificada. Los países exitosos serán aquellos con una estrategia de largo plazo y capaces de planificar las emergencias.
El reacomodo geopolítico también debiera ser mayor. La renuncia de Washington a su papel global ha revelado la falta de una nación que señale el camino, a pesar de los intentos de China por ocupar ese espacio. Las tensiones entre estas dos potencias no sólo se mantendrán, sino que se profundizarán por su cada vez mayor rivalidad estratégica.
La Unión Europea, en tanto, quedará dañada. La falta de ayuda a Italia, siendo “rescatada” por la propia China, y la difícil coordinación en la comisión, han puesto en entredicho la solidaridad del bloque. Es posible que post-crisis veamos una UE más tensionada, con mayores detractores internos, y una China aumentando su presencia con iniciativas emblemáticas como el megaproyecto “Belt & road iniciative” y futuros desarrollos tecnológicos.
Esta crisis acelerará tendencias que venían observándose en el orden global: abandono de EEUU de su histórico rol global, gobernantes ensimismados en sus asuntos internos y nuevos ánimos proteccionistas. Aunque indispensable, la acción colectiva será más difícil.
Fuente: Diario Financiero, abril 08 de 2020
Envíos bajaron 6,5%, mientras las importaciones 18,6%, dando cuenta de los efectos de la paralización global que provocó el coronavirus en los mercados internacionales. Los puertos también reflejaron una menor actividad.
Valparaíso registra caída de más de 50% en su actividad portuaria
Una fuerte baja en carga en comercio exterior, especialmente en importaciones, se registró en el primer trimestre en los principales puertos del país, como San Antonio y Valparaíso.
Según cifras del Servicio Nacional de Aduanas, en marzo las importaciones que ingresaron por San Antonio -medidas en valor- cayeron 17% anual, mientras que en el caso de Valparaíso retrocedieron 53% en igual lapso.
Si se toma todo el período enero-marzo, en Valparaíso bajaron 50% y San Antonio 11%. En volumen, en tanto, las mermas fueron de 20% y 1,9%, respectivamente.
Estos puertos ya registraban fuertes bajas en carga en los dos primeros meses del año, golpeada por el estallido social y la debilidad de la economía. Ahora, se suma el efecto que el coronavirus ha tenido en el comercio exterior.
Desde los puertos indican que, pese a la contingencia, las operaciones se han mantenido sin mayores problemas, dado que han implementado una serie de medidas para cautelar la salud y seguridad de los trabajadores y así mantener la continuidad operacional y garantizar la cadena de abastecimiento al país.
En el caso de la Empresa Portuaria San Antonio, se instaló un poste sanitizador de camiones en el paso bajo nivel del Nuevo Acceso hacia el recinto portuario. La medida tiene por objetivo sanitizar de manera más expedita a los camiones que circulan por dicha ruta, evitar congestión vehicular y figura como una optimización del protocolo, debido a que en este nuevo punto todos los camiones que pasan son asperjados (limpiados) obligatoriamente.
DP World, que opera Puerto Central, también dispuso fuertes medidas de prevención, seguridad e higiene en el terminal portuario en San Antonio, que implican restricción de accesos, trabajos con distanciamiento y grupos reducidos, entre otros. Gracias a ello, han estado trabajando a plena capacidad.
Compras de bienes durables se deploman y suman 13 meses de bajas
Las importaciones totales chilenas anotaron una fuerte caída de 18,6% en marzo frente a igual período del año pasado, al sumar US$4.776,31 millones, según las cifras del Banco Central. La variación es casi idéntica al retroceso que registró en octubre pasado, mes que estuvo marcado por el inicio del estallido social.
Al mirar los tipos de compras, las de bienes de consumo se contrajeron 23,5% interanual, el mayor retroceso desde marzo de 2019.
Dentro de las importaciones de consumo, los de bienes durables fueron los más afectados en este período, con un desplome de 35,9%.
Con esta variación son 13 los meses de caídas consecutivas, la mayor racha de retrocesos seguidos desde la iniciada en diciembre de 2013, cuando encadenó retrocesos por 19 meses. Esto precedió a un deterioro de las cifras de crecimiento, y que estuvo alineado con la evolución de la confianza de los consumidores.
Dentro de este ítem, el producto más afectado fue las internaciones de vehículos, que retrocedieron 58% en el mes, mientras que los televisores disminuyeron 56,7%.
Pese a que la importación de celulares en las primeras semanas de marzo mostró un deterioro, finalmente logró terminar el mes con un incremento de 2%, siendo uno de los pocos que subió en esta categoría.
Fuente: Pulso – La Tercera, abril 08 de 2020
A través de una declaración suscrita desde el PPD hasta el PC se establecen cuatro puntos que permitirían «salvar vidas, otorgar protección para las familias y cuidar la economía».
Tras haber sostenido este lunes una reunión con el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, de cara a una nuevo paquete económico para enfrentar los efectos del COVID-19, los timoneles de la oposición suscribieron hoy una declaración pública con una serie de medidas que estiman indispensables para enfrentar la crisis, entre las que incluso mencionan salvar de la quiebra empresas estratégicas o de importancia para el país.
En esta nueva propuesta opositora, los partidos restringen las necesidades más imperiosas a cuatro puntos que de implementarse permitirían «salvar vidas, otorgar protección para las familias de Chile y cuidar la economía», señalan.
En sentido, proponen resguardar los ingresos de las familias a través de una Renta Básica de Emergencia, Seguro Familiar u otro instrumento, para todos quienes se queden sin ingresos, hasta el final de la emergencia; la postergación de pagos y prohibición de corte de los servicios básicos mientras dure la emergencia sanitaria y de cuotas de créditos hipotecarios, estudiantiles u otras, sin intereses, contraídas con Bancos e instituciones financieras, casas comerciales; y, proteger a las PYME, empleos y economía, «evitando una recesión más profunda y duradera», a través de un proyecto de ley de apoyo estatal a las empresas en período de crisis, que debería ser ingresado al Congreso con urgencia.
Por último, los representantes de los partidos de oposición, plantean cuidar los empleos, prohibiendo el despido de trabajadores «y de ser necesario, salvando empresas estratégicas o de importancia para el país de la quiebra, evitando efectos negativos en el resto de la población mediante inyección de recursos a cambio de adquisición por parte del Estado de participación en el mayor valor de dichas empresas rescatadas».
En una de las declaraciones de más amplio respaldo de la opositor, los firmantes de la declaración son Carlos Maldonado, presidente Partido Radical; Álvaro Elizalde, presidente Partido Socialista; Heraldo Muñoz, presidente Partido por la Democracia; Catalina Pérez, presidenta Revolución Democrática; Gael Yeomans, presidenta Convergencia Social; Javiera Toro, presidenta Partido Comunes; Luis Felipe Ramos, presidente Partido Liberal; Guillermo Tellier, presidente Partido Comunista; Jaime Mulet, presidente Partido Federación Regionalista Verde Social; Camilo Lagos, presidente Partido Progresista; y Fuad Chahín, presidente Partido Demócrata Cristiano.
Fuente: Diario Financiero, abril 07 de 2020
Iniciativa busca evitar los despidos en las compañías que se han visto afectadas por la emergencia sanitaria.
Hoy se publicó en el Diario Oficial la llamada Ley de Protección del Empleo, la cual busca resguardar los puestos de trabajo y los ingresos de los trabajadores en el complejo escenario económico que ha provocado el coronavirus en el país.
La norma, que hoy entró en vigencia, permite que los trabajadores -manteniendo la relación laboral vigente con su empleador- puedan acceder a los beneficios del Seguro de Cesantía cuando los actos de la autoridad, como el establecimiento de cuarentenas obligatorias o cierres de empresa, impidan al trabajador prestar sus servicios.
¿Qué permite?
Así, la norma ofrece tres alternativas para hacer frente a la compleja situación laboral: suspensión del contrato por acto de autoridad; pacto de suspensión de contrato; y pacto de reducción temporal de la jornada de trabajo.
La suspensión del contrato por acto de autoridad contempla que se suspenda la relación laboral o contrato por el solo efecto de la Ley, cuando la autoridad declara la paralización de las actividades económicas de manera temporal, para el país o una zona particular.
¿Qué significa esto? Los empleadores deberán continuar pagando cotizaciones previsionales y de salud, y los trabajadores «recibirán remuneraciones con cargo al Seguro de Cesantía en la AFC o al Fondo de Indemnización en la AFP, en el caso de empleados de casa particular. Esto según la gradualidad de pago del Seguro, partiendo en 70% de los ingresos de los últimos 3 meses», explican desde el Ministerio del Trabajo.
La segunda opción, que corresponde a los pactos de suspensión de contrato, es similar a la primera pero rige para los empleadores cuya actividad se vea afectada, total o parcialmente, por la crisis Covid-19, permitiendo a estos acordar con sus trabajadores la suspensión temporal de sus contratos.
Las empresas que se acojan a esta alternativa deberán continuar pagando cotizaciones previsionales y de salud, y los trabajadores recibirán remuneraciones también con cargo al Seguro de Cesantía en la AFC o al Fondo de Indemnización en la AFP, en el caso de empleados de casa particular.
La última alternativa es la realización de pactos de reducción temporal de la jornada de trabajo. Los empleadores que opten por esta medida podrán acordar con sus trabajadores de manera individual o colectiva la reducción de hasta el 50% de la duración de su jornada de trabajo.
¿Qué efectos tiene esta opción? Según explica el portal protecciondelempleo.cl, el empleador pagará la remuneración de acuerdo a las horas efectivamente trabajadas y las cotizaciones previsionales proporcionales a la jornada.
El trabajador, por su parte, recibirá un complemento adicional a su sueldo de hasta un 25% con cargo al Seguro de Cesantía. Además, se mantendrán los beneficios tales como aguinaldos, asignaciones, bonos y otros conceptos excepcionales o esporádicos.
Un aspecto relevante que contempla la norma es que no se podrá despedir a los trabajadores por razones de fuerza mayor.
Beneficiados y exigencias
Según han explicado las autoridades, la ley beneficia a los trabajadores que cotizan para el Seguro de Cesantía y las trabajadoras de casa particular, que se vean afectados por las implicancias negativas que ha generado la llegada del Covid-19 al país.
Asimismo, el portal del Gobierno explica que también «podrán acogerse con efecto retroactivo aquellas personas que hayan celebrado pactos o iniciado procesos de desvinculación a partir del 18 de marzo de 2020«.
¿Quiénes no pueden acceder a los beneficios de la norma? Los trabajadores que no se rijan por el Código del Trabajo, y aquellos que no estén afiliados al Seguro de Desempleo; aquellos que hayan celebrado con su empleador un pacto que permita asegurar la continuidad de la prestación de los servicios con posterioridad a la entrada en vigencia de la Ley; y los trabajadores que se encuentren percibiendo subsidio por incapacidad laboral, cualquiera sea la naturaleza de la licencia médica o motivo de salud que le dio origen, durante el tiempo en que perciban dicho subsidio.
Respecto a las exigencias para acogerse a las alternativas que ofrece la nueva norma, para la suspensión del contrato «los trabajadores deben registrar tres cotizaciones continuas en los últimos tres meses, o seis cotizaciones continuas o discontinuas durante los últimos 12 meses. De estas, las dos últimas cotizaciones deben ser con el mismo empleador», explica el portal protecciondelempleo.cl.
En el caso de los pactos de reducción de jornada, la ley exige tener contrato indefinido con diez cotizaciones mensuales, continuas o discontinuas, con el mismo empleador. En el caso de los trabajadores con contrato a plazo, se les exige tener cinco cotizaciones mensuales, continuas o discontinuas.
Con relación a los trámites que deben realizarse para acceder a los beneficios, la norma establece que el trabajador no debe realizar ningún trámite. «Será el empleador el encargado de solicitar la suspensión de contrato de manera online ante la AFC, o ante la DT, en caso de pacto de reducción de jornada laboral. El trabajador que quede excluido, por alguna razón, podrá hacer la solicitud directamente ante la AFC», explica el portal habilitado por el Ministerio del Trabajo.
Sólo en el caso de las trabajadoras de casa particular, el trámite lo debe hacer el trabajador directamente en la AFP donde cotiza mensualmente.
Más información en torno a la norma, en www.protecciondelempleo.cl
Fuente: Diario Financiero, abril 06 de 2020
Cuando todo sugería que la economía mundial mostraría un buen dinamismo, de la mano del acuerdo comercial entre EEUU y China, llegó con una fuerza inusitada el coronavirus que ha paralizado parte importante de la actividad económica global. Enfrentamos un complejo escenario que conllevará un costo económico elevado, con alto impacto en el mercado laboral y en las empresas, especialmente en pequeñas y medianas, que por su naturaleza son más vulnerables.
La recesión mundial ya es un hecho y, como respuesta, buena parte de los países han implementado masivos estímulos. Del lado monetario, las tasas de interés han alcanzado nuevos mínimos históricos, al tiempo que se ha buscado fortalecer el canal crediticio. Los planes del lado fiscal involucran cifras siderales, de entre 5% a 20% del PIB dependiendo de la economía, buscando proteger a los sectores más expuestos. Así, han comenzado a escribirse nuevos capítulos en los textos de economía.
Por lo pronto, en materia sanitaria la estrategia apunta a acorralar al Covid-19 de forma de reducir los contagios y superar la emergencia. Mirando hacia adelante, surgen lecciones que debemos asumir con responsabilidad, al tiempo que comienzan a instalarse cambios culturales profundos en nuestra sociedad. Como bien decía Einstein, en una de sus tantas célebres reflexiones: «En las crisis nace la inventiva, la creatividad». Sin crisis, no hay desafíos. Debemos trabajar duro, especialmente una vez que retomemos la normalidad, de forma de recuperar con rapidez la actividad económica.
A nivel global, la magnitud del impacto sanitario y económico que estamos sufriendo muestra que no estábamos preparados para lo que vino. Al inicio se actuó con displicencia, lo que ha conducido a situaciones muy duras en algunos países. En palabras de Yuval Noah Harari: «Hemos sido testigos de un rotundo fracaso colectivo de liderazgo mundial». El nacionalismo que ha emergido con fuerza en algunos países ha socavado la cooperación internacional como estrategia para enfrentar una crisis de esta naturaleza. Puede ser que aprendamos la lección y se refuerce la globalización como el camino para avanzar hacia el desarrollo, contrariamente a lo que algunas voces han comenzado a pregonar, y se fortalezca la seguridad sanitaria.
La cuarentena que se ha ido aplicando selectivamente en nuestro país, así como las restricciones impuestas al comercio, van a cambiar de forma definitiva la manera en que trabajamos y nos relacionamos. Se advertían ya avances en el uso de aplicaciones digitales, al tiempo que se fortalecían los canales de distribución, a veces tímidamente, mientras el teletrabajo aparecía como algo excepcional. Pues a contar de ahora, esa evolución se acelerará dramáticamente. Como nunca, las empresas deben prepararse velozmente a un cambio cultural inminente. Algunas se han adelantado, producto de la adaptación que sobre la marcha han debido hacer dado el escenario que dibuja la crisis.
Hemos enfrentado este tremendo shock en medio de la crisis social, y por tanto en una posición económica debilitada. Esto nos debería llevar a la reflexión, dando cuenta de los elementos más esenciales de una sociedad. Debemos valorar con mayor fuerza la institucionalidad, la cooperación, el respeto por el prójimo, de forma de fortalecer los pilares que nos permitan responder efectivamente a situaciones complejas y no comprometer nuestro camino al desarrollo. Vemos, entonces, que se han abierto oportunidades en este escenario desafiante; no dudemos en hacerlas propias.
Fuente: Diario Financiero, abril 06 de 2020
Un 91% de los encuestados estima algún nivel de impacto. Análisis constata que las compañías fomentan el teletrabajo y el 52% de los directores indica que su primera prioridad ha sido la seguridad y bienestar de los colaboradores.
No hay empresa en el mundo que, dentro de sus mapas de riesgo, contemplara algo como lo que está sucediendo hoy, reconoce Alfredo Enrione, director del Centro de Gobierno Corporativo y Sociedad del ESE Business School, de la Universidad de los Andes.
El organismo realizó un estudio para conocer qué están haciendo las empresas nacionales ante la crisis sanitaria y sus expectativas, el que contó con la participación de 60 directores a través de videoconferencia y dos líderes del Boston Consulting Group, una encuesta online y conversaciones con directivos, altos ejecutivos y consultores.
Entre las principales conclusiones del análisis, está que las firmas están pasando por tensiones importantes en el cortísimo plazo, las que –explica Enrione- están relacionadas con “cómo continuar con sus operaciones para salvar la empresa y seguir sirviendo a sus clientes, y, por otro lado, cuidar a su gente y su salud”.
En el primer punto, agrega que “el foco está en sostener la continuidad operacional mediante el uso de tecnologías y nuevos sistemas, reforzando la capacidad de suministros, por ejemplo”, mientras que para lo segundo se han ido implementando protocolos para evitar contagios, asistencia médica y home office.
De hecho, según el estudio, el 39% de los participantes reconoció que, en sus empresas, entre el 51% y 100% de sus colaboradores están en modo teletrabajo, mientras un 39% reconoció que entre el 25% y 50% está operando en esa modalidad.
“La tecnología ha sido clave en términos de poder mantener una comunicación. Probablemente va a ser la tecnología la que nos va a ayudar a tomar decisiones sobre cómo podemos volver a ir retomando la actividad, cómo proteger a nuestra gente, definir a qué personas es conveniente protegerlas en sus casas y qué empleados podrán ir volviendo a los lugares de trabajo poco a poco”, anticipa Enrione.
La crisis –agrega- “está acelerando a una velocidad inimaginable todo el proceso de transformación digital que las empresas habían planificado, pero que estaban llevando de forma más gradual”.
No es un shock de corto plazo
Sin embargo, la visión de lo que significará esta crisis en el futuro de la organización no es positiva. Un 91% de los consultados estiman que tendrá un efecto negativo o muy negativo en el valor de la empresa en la que participan.
Además, retomar el normal funcionamiento no será cosa de semanas. El 64% estima que tomará entre tres y seis meses; el 20% entre seis y 12 meses, mientras 13% opina que el proceso se extenderá por más tiempo.
“La duración de la crisis evidentemente tiene, y tendrá, un impacto en el valor de las empresas. Hasta el minuto, se observa que la crisis está siendo larga y, por esto, va a tener un efecto duradero. De hecho, muchas empresas -particularmente medianas y pequeñas- es probable que desaparezcan. Esto no es un shock de corto plazo, sino que es algo que nos va a impactar por un buen tiempo”, indica.
Enrione agrega que las empresas se están centrando –después de los temas de seguridad, salud y continuidad operacional- en proteger la liquidez y la caja.
“Esta es una tremenda prioridad, porque es una manera de ganar oxígeno y poder sobrevivir bajo el agua, en momentos donde no hay ingresos o están muy mermados. La caja es el oxígeno que mantiene a las compañías sobreviviendo”, recalca el experto, quien detalla que 13% de los directores señalan que su principal prioridad de las últimas semanas ha sido preocuparse de la liquidez y de la cadena de pago.
La comunicación con los representantes de empresas dio cuenta de que ha existido una preparación de la caja para escenarios de restricción de liquidez y potenciales problemas de la cadena de pago, por ejemplo, realizando pruebas de estrés financiero con distintos supuestos.
Fuente: Diario Financiero, abril 06 de 2020
¿Sabía qué?
- Las exportaciones chilenas de servicios no tradicionales totalizaron US$1.279 millones en 2019, lo que equivale a un alza anual de 6,6%, alcanzando así el máximo histórico de las exportaciones de este sector.
- Desde 2003 a 2019, los envíos se han septuplicado creciendo a una tasa promedio anual de 12,4%.
- Las empresas exportadoras de servicios pasaron de 202 en 2003 a 690 en el último año, mientras que la cantidad de destinos se expandió de 64 en el año 2003 a 137 en 2019.
- Las exportaciones de servicios no tradicionales equivalen al 3,5% de los envíos no cobre del país y cerca del 13% de la fuerza laboral exportadora (aproximadamente 161 mil personas).
- El mercado de destino más relevante para las exportaciones chilenas de servicios es la Alianza del Pacífico con el 34% de participación, le siguen Estados Unidos (28%) y la Unión Europea (13%).
- En 2019, la Región Metropolitana, acumuló el 80% de las exportaciones nacionales de servicios, porcentaje equivalente a más de US$ 1.021 millones. Le sigue Valparaíso con el 10% (US$ 70 millones) y Biobío con el 6% (US$ 21 millones).
- Los servicios que marcaron récord histórico durante el 2019 fueron Tics, Servicios Financieros (US$134 MM), Investigación y Desarrollo (US$ 58 MM) y Servicios de Publicidad (US$ 11 MM).
Fuente: Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales, abril 06 de 2020