“La industria salmonera, y todo el encadenamiento productivo que ella genera, merece contar con una estrategia de desarrollo de largo plazo, una política a 30 años, con metas claras y desafiantes para impulsar el desarrollo regional y nacional, con las incalculables externalidades positivas que ello podría generar”.
Así lo señaló el presidente nacional de ASIMET, Fernando García, al intervenir en la Cena del Comité Los Lagos, tradicional encuentro anual que reúne a los empresarios metalúrgicos y metalmecánicos de la zona. La reunión se realizó en el centro de eventos Totoral y contó con la presencia de los secretarios regionales ministeriales de Economía, Trabajo y Energía, Luis Cárdenas, Ricardo Ebner y Liliana Alarcón, respectivamente, del director regional del Sence, Mauricio Toro y de otras autoridades gremiales y académicas de la zona.
En referencia a la industria del salmón, de la cual el sector metalúrgico y metalmecánico de la región es altamente dependiente, el presidente de ASIMET sostuvo que “la autoridad debe sostener una perspectiva clara del rubro, y no perderse en burocracias ni en la denominada “permisología” que impactan la productividad, al demorar algunas concesiones marítimas hasta 10 años en otorgarse”.
Agregó que el gremio está convencido de que es posible que el Estado y las empresas trabajen en conjunto, no como enemigos y adversarios, sino como socios en una estrategia de desarrollo.
“Aquí en la Región de Los Lagos, es fundamental que el Estado sea un aliado estratégico que esté dispuesto a eliminar los escollos que están frenando el dinamismo que presenta esta zona. Efectivamente, con un PIB en el primer trimestre de este año de 5,5%, Los Lagos es la región que está dentro de las tres primeras del país con mejor rendimiento económico. Este dinamismo del rubro contribuye a que la región tenga casi pleno empleo, pese a lo cual, subsisten trabas y escollos donde el Estado podría ser más proactivo en el camino a eliminarlos, para así frenar la pérdida de competitividad de esta industria frente al mercado europeo. Es así que, a pesar de este dinamismo exhibido los primeros meses del año, el segundo trimestre la actividad en la zona cayó un 1,5%, de la mano de la industria pesquera”, sostuvo García.
En este sentido, el dirigente gremial afirmó que esta zona tan rica en recursos naturales y en conocimiento productivo es la prueba más clara de que Chile tiene un potencial enorme, pero que necesita ser activado y dirigido con determinación y coraje. “No podemos seguir postergando las decisiones difíciles y las reformas necesarias que permitirían reactivar nuestra economía y ofrecer un horizonte de esperanza a las generaciones venideras, para lo cual es fundamental vivir en un entorno seguro, sin el miedo que sentimos hoy los chilenos de salir a la calle. No se trata solo de cifras económicas; hablamos de personas, de familias, de sueños y anhelos que no pueden seguir truncados”.
Finalmente, el presidente de ASIMET hizo un llamado a restaurar las confianzas, que permitan llegar a acuerdos para crear un mejor Chile para las futuras generaciones.
“No tengo duda de que como industria manufacturera podemos aportar de manera significativa en este desafío. Porque, a pesar del escenario recién descrito, el industrial chileno es por definición un emprendedor, un luchador. Es creativo, tiene ideas nuevas, se atreve a tomar riesgos, le preocupa genuinamente aportar al PIB de su país por lo que trabaja mucho más de 40 horas semanales y se preocupa por el bienestar de sus colaboradores, porque cree y sabe que es el recurso más valioso con el que cuenta”, concluyó.
Fuente: Diario Estrategia, diciembre 06 de 2024