La ley que prepara el Ejecutivo estaría enfocada en los afiliados de las aseguradoras, mientras las materias de la industria permanecerían a cargo de la Superintendencia de Salud.
Poco a poco la crisis de las isapres se fue tornando en un tema central para el gobierno del Presidente Boric. Si en un principio no había existido premura en responder a la presión de las aseguradoras, que llevan varios meses alertando por una inminente quiebra entre ellas, este lunes la situación protagonizó el comité político por segunda semana consecutiva.
Y a la salida de esa reunión, la ministra secretaria general de Gobierno, Camila Vallejo, anunció que para marzo el Ejecutivo espera presentar al Congreso un proyecto de ley que aborde la situación de los usuarios de isapres y sus prestaciones ante un eventual colapso del sistema privado.
“Evidentemente hay una preocupación”, admitió la vocera. “Nosotros conversamos hoy en el comité político de este tema, por cierto, que lo estamos tomando con suma responsabilidad y prudencia, lo que está sucediendo, pero la prioridad de nuestro gobierno es la protección y el resguardo de los usuarios y sus prestaciones”.
Foco en los afiliados
El proyecto es completamente independiente de la tarea pendiente de la Superintendencia de Salud, que debe generar el mecanismo para aplicar el fallo de la Corte Suprema que determinó que las isapres deben ajustar sus planes a la tabla de factores vigente, lo que podría concluir en devoluciones masivas de recursos a los usuarios.
De esta manera, la ley que prepara el gobierno estaría enfocada en responder a los más de 3 millones de afiliados a las isapres.
Según fuentes conocedoras del proceso, el proyecto establecería que los usuarios de las aseguradoras privadas puedan mantener sus condiciones ante la eventual quiebra de una de ellas.
Así, la estrategia consistiría en dar las atribuciones necesarias al sector público para que, en el caso de la insolvencia de una isapre, sus afiliados puedan continuar con la misma cobertura y seguir atendiéndose en el mismo prestador privado que utilicen en la actualidad.
“Nuestra preocupación como gobierno son los usuarios de las isapres y eso es lo que vamos a tratar de resguardar a todo evento”, afirmó la ministra Vallejo.
En esa línea, sostuvo que “por lo mismo, lo que hemos discutido ahora es seguir avanzando en la estrategia legislativa para que en marzo ya el Congreso pueda contar con una iniciativa legal en la materia que afronte este problema que complemente lo que sea la aplicación del fallo por parte de la Superintendencia y nos permita hacernos cargo de la protección de los usuarios y sus prestaciones y también fortalecer el sistema público de salud”.
Con el Congreso ad portas de entrar a su mes de vacaciones, febrero, para el gobierno no tenía sentido pisar el acelerador para ingresar un proyecto este mes.
El hecho de que el foco del proyecto esté centrado en los usuarios implica que todas las materias relacionadas a la industria misma de las isapres quedarían bajo la responsabilidad de la Superintendencia, partiendo por la pendiente aplicación del fallo de la Suprema.
Fuentes consultadas señalan que esta ley se limitaría a responder a la contingencia y que las temáticas de más largo plazo se seguirán discutiendo tanto en el Minsal como en la Superintendencia. De hecho, gobierno e isapres se reunirán nuevamente este miércoles y se espera que en esa cita se les entreguen más novedades a las empresas.
Las luchas internas
El acercamiento del gobierno a la crisis de las isapres ha ido cambiando a lo largo del último año y, aunque inicialmente no había definiciones acerca de cómo abordarla, en las últimas semanas ya se ha afirmado la convicción de que un colapso del sistema privado es algo que no se puede permitir.
Así, la ministra de Salud, Ximena Aguilera –quien tomó el mando de la cartera el día 6 de septiembre-, ha estado frecuentemente asistiendo a La Moneda a tener reuniones para gestar el proyecto de ley que buscará responder a la crisis.
Junto con Salud, estas citas también han contado con una activa participación de Hacienda. Tanto el ministro Mario Marcel, como la directora de Presupuestos, Javiera Martínez, han estado presentes en el proceso.
Mientras las isapres continuaban presionando constantemente para que el gobierno les diera luces de lo que iba a ocurrir con el futuro de la industria, al interior del Ejecutivo han buscado fórmulas para evitar un colapso del sistema sin renunciar a sus convicciones políticas.
Fuentes al interior del gobierno confirman que la idea de una reforma para avanzar hacia un Fondo Único de Salud sigue estando viva, pero que también existe el convencimiento de que esto debe ser de manera gradual y que un golpe de la magnitud de la quiebra de aseguradoras privadas pondría el proyecto cuesta arriba.
De este modo, se ha buscado la manera de dar una mano a las isapres, sin que esto parezca un “salvataje” para los privados y, a la vez, sin que parezca que se está utilizando la crisis para aprovechar de dar paso a la reforma del sistema de salud.
Fuente: Diario Financiero, enero 24 de 2023